«Ver esas declaraciones y esa forma de expresarse me produce un profundo dolor», sostuvo el ex Mandatario.
El ex Presidente de la República, Eduardo Frei Ruiz-Tagle, cuestionó el accionar del arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, en relación al intercambio de correos que sostuvo con el cardenal Francisco Javier Errázuriz.
Mensajes que revelaron la intención de ambos cardenales de evitar que el jesuita Felipe Berríos fuera designado capellán de La Moneda y que el periodista Juan Carlos Cruz, denunciante del caso Karadima, integrara la comisión para la tutela de los menores creada por el Papa Francisco.
«Soy católico de toda la vida y la verdad que ver esas declaraciones y esa forma de expresarse me produce un profundo dolor, no está en condiciones de presidir la iglesia chilena una persona que habla así», sostuvo el ex Mandatario tras participar de la inauguración de un parque en honor de su padre.
«Yo creo que moralmente y desde el punto de vista de una tradición cristiana en Chile muy importante, usar esas palabras de descalificación que usa en sus e-mails no me parece que sea propio de la autoridad máxima de la iglesia chilena y por eso la iglesia también está tan desprestigiada», indicó Frei.
Consultado por el eventual cierre de Punta Peuco, declaró: «Yo fui el que abrí Punta Peuco, porque en alguna parte tenían que estar todos los que habían violado los derechos humanos y uno de los primeros que entró fue Manuel Contreras, que nadie creía que iba a entrar e iba a ser detenido. Ahí empezó su condena por más de 500 años».
«Por allí han pasado cientos de personas que violaron los derechos humanos y espero que prontamente entren también los que asesinaron al presidente Frei, que se termine el pacto de silencio y tanto el Ejército, como la Universidad Católica entreguen los antecedentes que nunca han entregado para aclarar la muerte del presidente Frei», concluyó.
