Dice que su actitud es la de estar disponible para lo que se le requiera
“Las decisiones que yo tome no van a tener por referente a otras personas, sino que van a tener como referente lo que mi gente piensa, lo que mi partido y coalición piensan, y punto. Yo me metí en esto de por vida y los cargos públicos son fundamentales en la política. Es muy importante decir eso, porque algunos dicen: “Lo estoy pensando, lo estoy viendo. Voy a verlo”. Yo mismo he dicho eso en el pasado. Mi actitud es otra, no es decir “yo estoy viendo”. No, yo estoy disponible. Ahora, otra cosa es que me pongan. Estos no son concursos en que uno se autopromueve y le mueve y le informa al país si va a ser candidato o no. Uno acepta lo que los colectivos decidan”, explica el ex agente de Chile en La Haya.
El ex ministro y actual agente de Chile en La Haya, José Miguel Insulza, decidió apurar la carrera presidencial en el Partido Socialista, colectividad en la que milita, al afirmar que su actitud es la de estar disponible para lo que se le requiera y que está dispuesto a competir con cualquier contendor, sea este el ex mandatario Ricardo Lagos o la senadora Isabel Allende.
“Si mi gente cree que hago una diferencia, siempre he estado disponible en la política para lo que me pida”, sostuvo el “Panzer” a El Mercurio.
Y arremete: “Estoy dispuesto a competir con cualquiera, si mi partido y la gente creen que hago una diferencia. No tengo tabúes. Alguna vez pude haberlos tenido, en el sentido que tenía agradecimientos por algunas personas, pero mi decisión no la tomaré mirándole la cara a nadie. Eso es seguro”.
En ese sentido explica que “las decisiones que yo tome no van a tener por referente a otras personas, sino que van a tener como referente lo que mi gente piensa, lo que mi partido y coalición piensan, y punto. Yo me metí en esto de por vida y los cargos públicos son fundamentales en la política. Es muy importante decir eso, porque algunos dicen: “Lo estoy pensando, lo estoy viendo. Voy a verlo”. Yo mismo he dicho eso en el pasado. Mi actitud es otra, no es decir “yo estoy viendo”. No, yo estoy disponible. Ahora, otra cosa es que me pongan. Estos no son concursos en que uno se autopromueve y le mueve y le informa al país si va a ser candidato o no. Uno acepta lo que los colectivos decidan”.
Respecto a la postura de algunos dirigentes de la DC que han llamado a llevar a un candidato de sus filas en primera vuelta, Insulza cree que sería negativo y explica que “cuando fue la Presidenta Bachelet y la DC presentó un candidato alternativo, que era Claudio Orrego, y muchos se quejaban que cuando la campaña ya estaba abierta el que llevaba al candidato perdedor en la primaria daba mucha ventaja. Pero no creo que eso vaya a pasar ahora. Ese fenómeno de un candidato o candidata de avalancha generalmente no se da con demasiada frecuencia. Creo que sería más sano para la coalición que la Democracia Cristiana permitiera la elección de un candidato presidencial por la vía de la primaria”.
Insulza también afirmó que apoyará a candidatos a alcaldes si se lo piden, advirtiendo de paso que “nadie se queje”, apuntando directamente al diputado PPD Jorge Tarud quien lo cuestionó en el sentido que interferiri en política contingente afecta su rol como agente. “Esas son pamplinas. Siempre he sido vecino de Providencia, nací ahí, por cierto que voy a ir a alguna reunión de mi candidata a alcaldesa; cómo no voy a ir”, precisa.
Respecto a las cifras de la encuesta CEP, Insulza estima que son malas para todo el mundo político y “muestra que la crisis de la política es más persistente. Por lo tanto está encuestada, en primer lugar, debería ayudar a los políticos y políticas a ponerse todos a trabajar para mejorar la imagen colectiva más que obtener ventajas personales, lo cual evidentemente no ha dado resultado”.
Y añade que “la gente espera cambios. La verdad es que todo el mundo espera cambios significativos. O sea, no cambiar a Huguito por Dieguito ni a Dieguito por Luisito, para usar los nombres de los sobrinos del Pato Donald, porque son los tres más o menos iguales, sino que un cambio de rumbo”.
“Está claro que tiene que haber un cambio de gabinete. Conozco a la mayor parte del gabinete, tengo un tremendo afecto. Pero creo que hay un punto en que se tienen que soltar. Si yo me doy cuenta de que la gente no quiere que yo siga ahí, creo que uno tiene que dar un paso al frente y decir: “Presidenta, por favor, prescinda de mi servicio”. Se dice mucho que los ministros son fusibles, es decir el Presidente los cambia cuando quiere. No, no es cierto, porque se crean lealtades también, se crean afectos. Algunos ministros deberían darle una manito a la Presidenta y poner su cargo a disposición; no obligarla a ella a que cargue con todo el peso de tener que decirles que se vayan”.
Además cree que un cambio de gabinete sin ministerios claves “solo sirve para las estadísticas que hace la prensa. Un cambio de gabinete es cuando se van los ministros centrales, los ministros y ministras centrales que le van a dar un nuevo aire al gobierno”.
