Consejero constitucional electo por Atacama, Sfeir ha mostrado orgulloso desde 2012 su medalla y bandera del Congreso de los Estados Unidos a todo aquel que quiera saber más de su carrera. El entonces congresista David Rivera fue quien le hizo este homenaje por su trabajo denunciando a Cuba y Venezuela en medios de Miami. Ese mismo año Rivera perdió el cupo y comenzó a ser investigado por al menos 52 cargos de corrupción. Pero fue a fines de 2022 cuando fue detenido por los delitos de lavado de dinero y trabajar ilegalmente como “agente extranjero” de Venezuela en EE.UU.
“Quién es David Rivera, el excongresista republicano detenido y acusado de trabajar ilegalmente como agente extranjero de Venezuela en EE.UU.” Así tituló BBC News el pasado 6 de diciembre de 2022, cuando se daba a conocer al mundo que un otrora flamante congresista republicano cayó en desgracia y fue detenido por estos cargos imputados por la Fiscalía estadounidense. Rivera fue miembro de la Cámara de Representantes entre 2011 y 2012. Fue ese año cuando el chileno Paul Alexander Sfeir Rubio fue homenajeado por este excongresista, recibiendo de él una condecoración y la bandera estadounidense que había flameado días antes en el edificio que alberga a la Cámara de Representantes de Estados Unidos.
De ese homenaje se sabe por el propio Sfeir –ahora electo como el consejero constitucional por el Partido Republicano con mayor votación en Atacama–, cuando en 2021 corría para ser diputado por el Distrito 7 (Viña del Mar, Algarrobo, Valparaíso, Cartagena, Casablanca, Concón, San Antonio, El Quisco, El Tabo, Isla de Pascua, Juan Fernández, Santo Domingo), bajo la Lista Frente Social Cristiano, como militante del Partido Republicano. En su web y redes sociales, así como en un blog que mantiene activo, publica orgulloso el hecho de haber sido “galardonado por su trabajo en el Congreso chileno y norteamericano”.
Intentando corroborar dicha información, El Mostrador se encontró con la firma de quien emitía ese certificado y allí aparece el nombre de David Rivera, ya que en las publicaciones de Sfeir solo se indica el hecho, pero no quien le hacía este honor.
De acuerdo a lo que se ha conocido de la acusación contra este cubanoamericano, exmiembro de la Cámara de Representantes, se asegura que entre los cargos destacan “conspirar en contra de Estados Unidos y participación en actividades financieras ilegales, incluyendo lavado de dinero”, y se detalla que “participó en una conspiración para hacer lobby a favor del gobierno de Maduro, no solamente para mejorar las relaciones bilaterales, sino también para solucionar una disputa entre Caracas y una petrolera estadounidense; así como para poner fin a las sanciones económicas de Washington”, como indican todos los medios escritos que dieron a conocer el hecho en Estados Unidos y agencias de noticias.
Incluso Infobae de Argentina explica que el excongresista de Miami había sido contratado por el régimen de Venezuela en 2017, para una consultoría por un valor de 50 millones de dólares con Citgo, la filial estadounidense de Petróleos de Venezuela (PDVSA), con el objetivo de mejorar la imagen de esa corporación en EE.UU.
Cuando Juan Guaidó fue proclamado presidente interino de Venezuela y líder opositor, nombró a un nuevo equipo directivo de PDVSA en Estados Unidos, que inició una auditoría a Citgo, la filial con sede en Delaware, que dio lugar a esa demanda en 2020. Rivera funcionaba a través de su empresa Interamerican Consulting, y no habría realizado trabajo alguno como parte del contrato firmado, que es el documento que investigan fiscales federales en Miami.
El asunto en cuestión es que “el contrato de Rivera era con una entidad estadounidense, por lo que cualquier trabajo que realizara en favor de intereses comerciales venezolanos habría requerido registrarse como cabildero extranjero, lo que según parece no realizó. Rivera recibió solamente una parte de los 50 millones de dólares, pero la acusación denuncia que, supuestamente, desvió el dinero a un narcotraficante y a una compañía de yates a nombre de un magnate televisivo venezolano buscado por las autoridades estadounidenses”, plantean las diversas notas encontradas sobre este caso.
La Agencia EFE, además, informó que Rivera fue acusado el pasado 16 de noviembre de 2022 por un gran jurado federal del Distrito Sur de Florida de Miami, pero hasta ese momento el documento permanecía sellado, por lo que de forma oficial no se conocían los cargos. De hecho, Rivera había estado bajo investigación durante años.
En una nota del año 2012 se criticaba que “como congresista federal, Rivera gana US$174.000 por año. Por ejemplo, según su interpretación, todos sus gastos de viaje, pasajes aéreos, alquiler de automóviles, alojamiento, comidas y artículos diversos para su uso personal y su entretenimiento pueden deducirse de este fondo millonario. Incluyendo los gastos a favor de las mujeres que lo acompañan”.
Allí también se relata que, tras su salida del Congreso estadounidense, “los fiscales redactaron nada menos que 52 cargos criminales en su contra, incluyendo de lavado de dinero, de vinculación con el crimen organizado y hurto mayor. Está bajo sospecha de toda una serie de actividades ilegales que incluyen una comisión de 510,000 dólares en pagos secretos que se hicieron en 2008 a su madre, de parte del cinódromo Flagler Dog Track, un préstamo de 132 mil dólares que se le hizo y más de 75 mil dólares en pagos a la hija de uno de sus empleados, pagados supuestamente por ‘cortesía’”. Y se suma que se descubrió “que el político canalizó secretamente más de medio millón de dólares de intereses hacia la firma Millenium Marketing, sucesivamente propiedad de fachada de su mamá y de su suegra”.
Nació en 1965 en la comuna de Viña del Mar. Ha comentado en entrevistas que, a los ocho años, específicamente en 1973, su familia huyó del marxismo hacia Venezuela. “Ha dedicado gran parte de su vida al activismo internacional en defensa de la Democracia y los derechos de ciudadanos de países que sufren dictaduras como Cuba, Venezuela y Nicaragua”, se consigna en sus redes.
También cuenta que, siendo profesional, se trasladó a Miami, Florida, donde fundó la primera estación radial con trasmisión en tiempo real por Internet en español.
En un perfil que publicó Ex Ante hace unos días, se sostiene que en Miami “fue periodista y ancla de la Agencia Federal OCB (Office for Cuba Broadcast), perteneciente al Departamento de Estado de EE.UU., y hoy es ancla y periodista en Radio República para todo el Sur de la Florida y toda la cuenca del Caribe”.
Entre los trabajos que ha tenido, como destaca en su cuenta en LinkedIn, se cuentan los siguientes: representante de la Radiodifusora Libra y Nexo S.A. en el Congreso Nacional de Chile en Valparaíso y en el Palacio de La Moneda en Santiago, entre 2012 y 2019; Radio Televisión Martí, desde agosto de 2019 hasta marzo 2021, en Miami/Fort Lauderdale; “Hola América” TV Show, entre junio y octubre de 2019, también en esa zona de Miami.
Previamente, entre marzo de 2017 y mayo de 2019, fue coordinador territorial y asesor legislativo en el Congreso de Chile. De hecho, Paul Sfeir Rubio fue asesor externo del diputado RN Luis Pardo, y aseguran que “no hay registro de que haya recibido distinción alguna de este Parlamento”, pero siguen buscando.
También dice que es ingeniero, profesor de matemáticas, comunicador audiovisual, experto en varios temas tecnológicos, que estudió locución en Venezuela, así como estrategias de educación. Intentamos contactar a las universidades donde habría estudiado, sin obtener respuestas. Sin embargo, lo que sí pudimos establecer es que no aparece en sitios oficiales la obtención de la licencia o certificado de locución, así como tampoco está afiliado al Colegio de Ingenieros del país caribeño.
En lo personal, si bien en su Declaración de Patrimonio e Intereses dice ser soltero, en su informe comercial aparece con estado civil casado. Y en el certificado de matrimonio existente en el Registro Civil figura aún desposado con la periodista venezolana Donatella Ungredda, quien además es traductora y vicepresidenta de la Asociación de Periodistas Venezolanos en el Extranjero (APEVEX), en Miami. Con ella tiene la empresa Ungredda Sfeir US Services Inc., creada el 23 de mayo de 2019, que está activa y de la cual no se informó en la declaración.
Otra empresa vinculada a él, y tampoco informada, se creó en Chile en marzo de 2004. Se trata de Importadora Sfeir Compañía Limitada, Nombre de Fantasía ISC Ltda., en la que es socio con dos de sus hermanos y en la que Paul Sfeir es representante legal de la misma, con domicilio en Miami, Florida, Estados Unidos, y que aún aparece vigente.