«Maturana, te voy a cagar», le habría dicho el titular del Minsal al ex presidente de la Confusam. El secretario de Estado dijo que efectivamente se encontró al interior del Congreso con el dirigente, pero negó tajantemente haberlo amenazado.
Como una actitud “sin precedentes” calificó el diputado del PPD Rodrigo González el comportamiento del ministro de Salud, Jaime Mañalich, durante la sesión especial que se realizó este martes en la Cámara baja debido a las expresiones vertidas por el titular de la cartera respecto de los estudiantes de Buin que realizaron una huelga de hambre.
Si bien el secretario de Estado estuvo presente durante toda la sesión, para sorpresa de la coalición opositora, no intervino para hacerse cargo de las críticas realizadas por los parlamentarios que solicitaron la sesión especial.
En el PPD quedaron molestos con la actitud de Mañalich y no lo ocultaron. Al punto que el diputado Marco Antonio Núñez, tras la sesión, señaló que “la actitud del ministro es francamente incomprensible. Él abusa de su relación de amistad con el Presidente Piñera para pasar a llevar a todas las personas que le piden explicaciones o soluciones en diversos temas, como fue lo que pasó en agosto con los estudiantes de Buin”.
Pero no solo eso molestó en la tienda. También ocurrió el hecho del que fue objeto el diputado González, quien se encontró en un pasillo con el ministro concluida la sesión especial. Durante su intervención el legislador por Viña del Mar había emplazado a Mañalich a “dar cuenta, aquí y ante Chile, si mentir es parte de la nueva forma de gobernar”, por lo que cuando se encontró con el aludido, éste, no sin ironía, le agradeció sus palabras, porque debido a ellas –según relató González- decidió no intervenir en la sala, porque encontró que el diputado le faltó el respeto.
Ese, sin embargo, no habría sido el único encontrón de Mañalich tras la sesión. Según el ex presidente de la Confusam, Esteban Maturana, en los alrededores del los ascensores del segundo piso del Congreso, se topó con el ministro, quien lo habría amenazado diciéndole “Maturana, te voy a cagar”. Y pese a que, según relatan algunos observadores, Carolina Espinoza, actual presidenta de la Confusam, le habría hecho ver que ese comportamiento no era propio de un ministro, Mañalich habría insistido en el punto.
Aún cuando al ser consultado por El Mostrador el ministro reconoció el encuentro, descartó tajantemente haber tenido el exabrupto del que se le acusa.
