Gastronomía
El espumante se ha convertido en la bebida más apetecida en estas fechas, ya que es fresco, fácil de tomar y ha sabido encantar a los consumidores de todas las edades. Mientras que el Late Harvest cada día suma más adeptos, de la mano de la tendencia a buscar vinos más amigables y fáciles de beber.
El vino espumoso o espumante es muy versátil y se puede disfrutar como aperitivo, formar parte de diferentes cócteles o para maridar distintos tipos de comida. Su frescura ha sabido encantar a consumidores de todas las edades.
Por eso estará presente en muchas de las festividades de fin de año o puede ser un buen regalo. ¿En qué hay que fijarse a la hora de elegir un buen espumante? Un factor de calidad es el tamaño y persistencia de la burbuja, la que debe ser pequeña y continua, además de formar una corona delgada al borde superior de la copa, dicen los expertos.
Mientras que, tal como lo dice su nombre, el Late Harvest es un vino que se produce a base de una cosecha tardía, es decir, a partir de uvas secas, que son cortadas mucho más tarde de lo habitual, cuidadosamente seleccionadas, cosechadas a mano y almacenadas en barricas de roble favoreciendo su tiempo de duración.
El resultado es un vino ligeramente dulce que se convierte en la elección perfecta para acompañar bajativos y postres, y deleitar los paladares de quienes buscan una experiencia única.
Con nueva imagen vuelve este clásico espumante Extra Brut, proveniente de uno de los viñedos más costeros y extremos de Chile. Un acompañante ideal para las fiestas de fin de año.
Sin duda, Su demanda ha crecido rápidamente en todos los rincones y Chile no es la excepción, más si se considera que contamos con excelentes exponentes de esta burbujeante bebida.
Proveniente del viñedo El Granito, uno de los viñedos más costeros, y con una fresca y renovada imagen está el Leyda Extra Brut Método Tradicional, elaborado con uvas 100% Chardonnay.
Este vino espumante destaca por su corona blanca y persistente, con burbujas pequeñas y constantes. En nariz muestra la mineralidad del Valle de Leyda con notas cítricas y frescas, manzana verde y notas florales junto a suaves notas de pan tostado y jengibre aportando complejidad. En boca es fresco y cítrico, con una acidez crujiente y punzante que alarga el paladar.
Otra reconocida viña es Morandé, que destaca con sus espumantes de alta calidad. K.O Brut es original, puro y de magnífica simplicidad. Destaca su frescor juvenil logrado bajo una fermentación por método tradicional.
En boca es de rica acidez, ligero, alegre y juvenil, de atractivo balance y muy refrescante. Sus burbujas le agregan un carácter festivo, son muy abundante, finas y persistentes, que se liberan a raudales con su fuerza de juventud.
Otra alternativa es Myla con Extra Brut, perfecto por su combinación de “fineza, complejidad y frescura”, e ideal para compartir ostras y ostiones. O un Brut Rosé Myla, espumante de gran carácter, fresco y frutal, perfecto para acompañar frutillas y frutos del bosque, o bien el Brut, que tiene una gran corona de larga, alta y fresca persistencia, perfecto para maridar con frutos del mar.
Patricio Azocar, enólogo de Cooperativa Capel, destaca que espumantes “como Sensus Moscatel Dolce, Francisco de Aguirre, acaba de ser premiado en la tercera edición de los Catad’or World Spirits Awards con 88 puntos, o Myla Rosé, con 85, ambos puntajes equivalentes a Medalla de Plata.
De Sensus destacan Extra Brut, ideal para maridar con productos del mar como las ostras, caviar, ostiones y salmón; Brut Rosé, fresco, frutal, con notas a frutos rojos, o Demi Sec, con gran equilibrio, acidez y un agradable dulzor que lo hace ideal para tomar con aperitivos.
Mientras que Casillero del Diablo cuenta con Devils Brut, un excelente aperitivo con notas cítricas que se entremezclan con manzana verde, pequeños toques minerales y frescos, con una burbuja sutil.
Servido bien frío, se convierte en la elección perfecta para dar inicio a la celebración, especialmente al acompañar quesos frescos y de baja maduración. Sus burbujas delicadas se despliegan para limpiar, por ejemplo, la untuosidad de los quesos cremosos, transformando cada bocado en una experiencia refinada.
En cuanto a alternativas innovadoras, hace cinco años Carmen y Frida Kahlo Corporation alcanzaron un acuerdo para elaborar vinos uniendo ambas marcas. La exitosa alianza tuvo recientemente un nuevo lanzamiento: Carmen Frida Kahlo espumante brut en lata, un producto destaca por su vibrante diseño inspirado en la icónica artista mexicana.
Este espumante ofrece una ocasión de consumo más flexible y relajada mediante un formato altamente valorado por su practicidad. Además de ser fácil de transportar, destaca por su sustentabilidad al ser 100% reciclable. Una lata deespumante equivale a una copa y también cuenta con un sello termosensible que indica cuándo está lo suficientemente frío para disfrutarlo.
Para quienes busquen el mismo sabor refrescante de siempre, pero con menor grado alcohólico y bajo en calorías, está Viñamar Rosé Zero desalcoholizado, de color rosa pálido y se pueden percibir aromas con notas florales y frutales, con un final dulce.
Sus delicadas burbujas llevan a las mismas particularidades de un espumante tradicional, pero con menos de 0,5° de alcohol y menos de un tercio de calorías.
Esta temporada de altas temperaturas es ideal para el disfrutar del Late Harvest con postres y quesos, o como bajativo en reuniones sociales al aire libre.
Castillo Molina Late Harvest, por ejemplo, es de aromas melosos y florales, y de sabor dulce, acompañamiento ideal para un clásico pannetone y un suave helado.
Cosechadas delicadamente a mano, las uvas en su punto máximo aromático, permiten la creación de un vino dulce y fresco, de perfecto equilibrio.
Por su parte, Toro de Piedra Late Harvest está elaborado en base a 90% sauvignon blanc y 10% semillón. Proveniente de Sagrada Familia, en el Valle de Curicó, fascina por su color amarillo dorado e intensas notas a durazno, nueces, almendras y miel. En boca es jugoso, amplio y balanceado, con su buena acidez.
Su cosecha es manual, con selección en el viñedo a inicios de mayo, y su vinificación es con un prensado de racimos enteros y una fermentación en cubas de acero inoxidable. Su guarda es de 12 meses.
Mientras que el Tarapacá Late Harvest destaca por una muy buena relación azúcar-acidez, lo que permite que sea muy fresco, agradable y placentero.
Se complementa muy bien con quesos maduros, como el azul, por lo que es una excelente opción para quienes tengan pensado celebrar con una tabla de quesos y una copa helada de Late Harvest, o incluso para quienes consideren regalar chocolates, pues se marida muy bien con ellos.
Otra alternativa es la apuesta de Casillero del Diablo con su nuevo Late Harvest, un vino fresco proveniente del Valle del Maule, de amarillo dorado con toques ámbar y en paladar.
Se siente delicadamente frutoso en boca, con notas de miel, y es perfecto para servirlo bien frío y en compañía de postres, frutas y quesos maduros.
