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Como mantener las pieles sanas y protegidas ante los cambios de temperatura Salud

Como mantener las pieles sanas y protegidas ante los cambios de temperatura

La piel es el órgano de mayor exposición y la falta de conciencia de esto puede desencadenar diferentes afecciones.. Su hidratación, protección y cuidado son aspectos fundamentales para mantener una piel sana y radiante.


La piel es el órgano más grande del cuerpo y muchas veces no le damos el cuidado que requiere, considerando que es el que mayor exposición tiene a factores externos en el medio ambiente.

Por eso existe un amplio portafolio de productos, soluciones y servicios especializados en la protección y cuidado de la piel.

Las cremas corporales son productos diseñados para hidratar y suavizar la piel del cuerpo. Están especialmente formuladas para áreas más grandes del cuerpo y suelen tener una textura más espesa que las cremas faciales. Pueden contener ingredientes como aceites, mantecas y humectantes para ayudar a mantener la piel suave y flexible. Deben aplicarse después de la ducha o el baño, cuando la piel está aún ligeramente húmeda, para ayudar a sellar la humedad.

Las cremas hidratantes son productos diseñados para mantener la piel facial y/o corporal, hidratada. Vienen en diferentes formulaciones según el tipo de piel (seca, grasa, mixta, sensible, etc.).

En el caso de las cremas faciales, contienen ingredientes como ácido hialurónico, glicerina y ceramidas para mantener la hidratación y la barrera cutánea. Además usar cremas o lociones corporales que contengan Urea, una sustancia natural que ayuda a mantener la piel hidratada, son excelentes para cuidar las pieles resecas o con picazón.

Los productos after sun están diseñados para aplicarse después de la exposición al sol. Están formulados para calmar, enfriar e hidratar la piel, especialmente cuando está enrojecida o irritada por la exposición al sol. Suelen contener ingredientes como aloe vera, camomila y vitamina E para aliviar la piel.

Mientras que los protectores solares son esenciales para proteger la piel de los daños causados por la radiación ultravioleta (UV) del sol. Vienen en forma de cremas, lociones, geles o aerosoles y deben aplicarse antes de la exposición al sol.

Los protectores solares ayudan a prevenir quemaduras solares, envejecimiento prematuro de la piel y reducen el riesgo de cáncer de piel. Es importante elegir uno que ofrezca protección de amplio espectro y tenga un factor de protección solar (FPS) adecuado para tu tipo de piel y las condiciones climáticas.

Rutina diaria

Además, cada persona puede tener necesidades de cuidado de la piel diferentes, por lo que es importante adaptar tu rutina de cuidado según tu tipo de piel y tus preocupaciones específicas.

María Fernanda Morales, enfermera y especialista clínica Chile & South Cone de Essity, comenta que “la piel es la primera barrera que el organismo tiene de defensa”.

“En este sentido, destacamos la importancia de conocer los componentes e insumos de los productos que utilizamos para cuidar nuestra piel. Además, generar hábitos en las rutinas diarias enfocados a su cuidado y prevención de la enfermedad”, detalla la experta.

Es importante recordar que la hidratación de la piel es esencial para mantenerla saludable, y combinar el uso de cremas hidratantes, cremas corporales, after sun y protectores solares en tu rutina de cuidado de la piel puede ayudar a mantenerla en óptimas condiciones y protegerla de los efectos dañinos del sol.

En Chile, la primera causa de muerte es el cáncer y las cifras han ido en aumento. Dentro del cáncer de piel más frecuentes, están el carcinoma basocelular y de células escamosas, ambos relacionados a la exposición solar, piel anciana y piel clara, entre otros factores, según la evidencia científica actual.

De acuerdo con Morales, el 60% de los casos dermatitis atópica se desarrolla en el primer año de vida. Pero es necesario que durante cada etapa se generen hábitos para el cuidado y prevención de enfermedades o afecciones:

Seguir una rutina de cuidado de la piel con productos que no alteren el pH natural: el baño diario es esencial para eliminar la acumulación de grasa y microorganismos en la piel, pero que la elección del jabón es crucial. Por eso se sugiere usar un producto con un PH similar al de la piel, de alrededor de 5.5.

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