Un mercado local que funciona en un sitio donde próximamente se constuirá un edificio en Providencia y la instalación de un parque en las pasarelas de las torres San Borja, en Santiago. Los encargados de ambos proyectos conversaron sobre esta experiencia en el programa Estación Cuneta de Radio La Centrral. Escúchalos aquí.
Un mercado local que funcionó en un sitio donde próximamente se constuirá un edificio en Providencia y la instalación de un parque en las pasarelas de las torres San Borja, en Santiago. Se trata de dos iniciativas que tienen en común el mismo espíritu: la recuperación para el uso ciudadano de espacios urbanos abandonados de la ciudad, donde los fines de semana se instalan ferias, foodtracks y se organizan ‘tocatas’.
La experiencia de quienes están detrás de estas iniciativas es el tema que abordó la periodista Javiera Hernández en el programa Estación Cuneta de la radio online La Central y que esta semana tuvo como invitados a a Henry Bauer y Gabriela Alfaro, del proyecto musical y de jardinería Pasarelas Verdes, y a Karina Toro y Francisca Armas, de la feria La Dominical, que funcionó en un sitio ubicado en el número 137 de la calle Bucarest, en Providencia.
«El mundo en sí mismo es una cosa que está botada y hay que completarla. Para nosotros todo el medio que conocemos, todos los edificios que conocemos desde que nacemos es nuestro medio natural, estaba ahí. Y el hecho de pode transformarlo es un instinto propio del humano. Mover los muebles para que parezca que influiste en tu propio espacio es una condición humana», explicó Bauer sobre la motivación detrás de la decisión de llevar plantas y convertir en una zona verde las frías e inhospitas estructuras de concreto de las pasarelas del complejo residencial ubicado en las cercanías de la calle Portugal con la Alameda.
Y agregó: «La arquitectura moderna tiende a ser abandonada y tiene un aspecto abandonado, pero cada lugar es una sorpresa. Eso ayuda a que el proyecto funcione y llegue a la gente».
Por su parte, Francisca Armas dijo que para La Dominical andaban en busca de un lugar verde. «Por eso queríamos una plaza o un parque. Pero como nunca logramos ningún permiso y apareció este lugar que estaba demolido, dijimos ‘hagamos un parque acá’. Así que trajimos el verde».
Por su parte, Karina Toro afirmó que elegir este espacio fue como el dilema a la hora de adoptar unamascota. «Para qué vas a comprar una mascota si hay tanto perrito guacho. Ocupa lo que hay y ocúpalo bien, si ya está ahí. Hay un montó de espacios vacíos que pueden servir para algo y están las ganas de hacerlo».
