En un levantamiento de datos realizado por la plataforma digital de inversiones Clever, se comprobó que parrillar se encareció al menos un 20% entre 2021 y 2022, cifra que casi dobla la inflación en doce meses y que presiona aún más a la capacidad adquisitiva de los hogares chilenos.
Este año la inflación ha afectado a miles de familias chilenas, puesto que ha llegado a su nivel más alto en 30 años, al marcar 14,1%.
Este dato preocupa a los chilenos y chilenas de cara a la celebración de Fiestas Patrias, puesto que los productos infaltables en este 18 de septiembre tendrán un valor más alto que el año pasado.
En un levantamiento de datos realizado por la plataforma digital de inversiones Clever, se comprobó que parrillar se encareció al menos un 20% entre 2021 y 2022, cifra que casi dobla la inflación en doce meses y que presiona aún más a la capacidad adquisitiva de los hogares chilenos.
El reporte analizó los productos que componen a un asado clásico, comparando sus precios promedio en supermercados de todo Chile en la semana 35 de este año -últimos días de agosto, primeros días de septiembre- y el anterior, según los reportes oficiales de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (ODEPA).
Así, se concluye que un corte (considerando un kilo) de sobrecostilla, pulpa de cerdo y trutro entero, más papas, choclo, tomates y cebolla -también de un kilo cada uno-, el año pasado tenía un precio total de $17.389, mientras que este año ronda los $21.311. Es decir, esta canasta dieciochera aumentó un 22,5% en doce meses.
En tanto, una versión más “premium”, que considera cortes de lomo vetado, filete, costillar de cerdo, además de papas, choclo, cebollas y tomates, pasó de costar $37.750 en 2021, a $45.626 por estos días. El alza en este caso es de un 20,8%.
La Finance Content Manager de Clever, Kamila Cortez, destaca que «como se ve en este análisis, la alta demanda de productos en festividades hace que las mismas se encarezcan incluso por sobre la línea de la inflación, que hasta ahora ronda los 13 puntos. Por eso es importante que las personas tomen medidas, ya sea buscando opciones, planificando su presupuesto o estableciendo estrategias para compensar el gasto».
Una de las opciones es elegir bien el lugar de compra de los productos. Por ejemplo, según la propia Odepa, un kilo de sobrecostilla en Santiago es un 12% más barato en supermercados que en carnicerías, mientras que la papa es un 60% más barata en ferias libres. La pulpa de cerdo, por su parte, es un 9% más barata en las carnicerías.
Otra posibilidad, desde el punto de vista de las finanzas del hogar, es planificar bien este gasto. “Esto, no significa necesariamente gastar menos, sino que establecer un presupuesto que quede considerado en tu balance del mes. Por ejemplo, si se recibe un aguinaldo, en dinero, destinar solo ese monto para los gastos de las celebraciones y no recurrir además a nuestro presupuesto mensual. Eso no solo permite no utilizar más de lo presupuestado, también hace posible tener claridad de si en los meses siguientes deberás hacer ajustes en tus gastos”, destaca Cortez.
La experta en finanzas personales agrega que “una buena planificación de tus finanzas también permite que, recortando gastos hormiga durante el año, o siendo más conscientes de la capacidad de ahorro mensual, se puedan pasar mejor organizados las festividades como Semana Santa, el 18 y la Navidad. Lo importante es comprender que la inflación se refleja todavía más en las festividades, y hay que delimitar estrategias para combatir esas alzas”.