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El mundo al revés en las AFP: a menor riesgo mayor retorno

Héctor Cárcamo
Por : Héctor Cárcamo Periodista El Mostrador Mercados
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A nivel de inversiones, históricamente la renta variable ha sido sinónimo de mayores ganancias, pero también mayor riesgo, mientras que la renta fija ha sido tradicionalmente una inversión más segura, pero con menor rentabilidad.

Sin embargo, lo que está ocurriendo en los fondos de pensiones está remeciendo esas bases. Las turbulencias en los mercados no han cesado y los instrumentos de deuda pública o privada se han transformado en una alternativa de inversión casi irresistible para cotizantes en busca de un lugar seguro para invertir.

Esta situación se ha traducido en que los fondos más riesgosos, que prometen mayores ganancias, no sólo no están superando a los de menos incertidumbre, sino que, literalmente, siendo barridos por éstos, y no sólo este año, sino hace al menos un trienio.

Según el informe de la Superintendencia de Pensiones al 31 de agosto de 2012, el Fondo A acumula una ganancia de apenas 2,62% en los últimos 36 meses.

Este fondo, que concentra US$ 27.000 millones (17% del sistema), está invertido en un 75% en acciones o fondos mutuos, mayoritariamente extranjeros.

Por el contrario, el Fondo E invierte casi un 99% de los US$ 15.000 millones que administra en activos de bajo riesgo y en Chile; destino frecuente son papeles de deuda del Banco Central, de la Tesorería General de la República, bonos y efectos de comercio de empresas y depósitos a plazo en bancos.

En los últimos tres años este fondo acumula una ganancia anual promedio de 5,01%, casi el doble del A.

Entre los otros fondos la relación es bastante más pareja. El B invierte el 54% de los US$ 27.000 millones que administra en renta variable y más de la mitad afuera. Desde septiembre de 2009 anota una rentabilidad anual de 3,41%.

El D, en tanto, gestiona más de US$ 23.000 millones y los destina en un 85% a renta fija. En los últimos 36 meses ha rentado 4,05%.

Y el C, que maneja el 40% de los fondos, más de US$ 60.000 millones, creció 3,68% en el mismo plazo, gracias a un portafolio de inversión que hoy tiene un 35% a renta variable y un 65% a renta fija, con dos tercios de las platas puestas en Chile y el saldo en el extranjero.

En todo caso, los porcentajes de inversión obedecen a distintos factores, no sólo la decisión de inversión de las AFP.

También se explican por el mismo resultado de las inversiones que hacen crecer los porcentajes de los instrumentos que más ganaron y por la decisión de los afiliados que se cambian de fondos, obligando a las gerencias de inversiones de las AFP a realizar ajustes en los portafolios y además reasignar el destino de los casi US$ 500 millones que cotizan cada mes de los afiliados.

De acuerdo a un informe del BCI de hace dos semanas, la fuerte apuesta por instrumentos en renta fija por parte de las AFP genera riesgos para el momento en que se supone se comience a revertir la situación de turbulencia en los mercados y en que la inversión en activos de renta fija baje y la demanda por inversiones en renta variable aumente.

Según el banco, hacia fines de 2014 o comienzos de 2014 veremos un “sell-off mayúsculo de instrumentos de renta fija que empujará las tasas bases a niveles muy superiores, acotando el espacio para colocaciones corporativas y del Banco Central/Tesorería”.

La fuerte distancia entre el buen rendimiento de la renta fija y el mal desempeño de la renta variable en los últimos 36 meses ha llevado a que se acorten también las diferencias desde que se creó el sistema en agosto de 2002.

Hasta fines de 2007, el A acumuló una rentabilidad de anual acumulada desde 2022 de más de 15%, mientras el E estaba bajo el 4%.

La crisis subprime de 2008 significó el punto de partida de un cambio en la relación de rentabilidad entre la renta variable y la renta fija, el que se ha venido consolidando hasta ahora, cuatro años después del crash financiero con la quiebra de Lehman Brothers en septiembre de 2008.

Hoy el Fondo A acumula una ganancias de 6,42% desde 2002 y supera en casi 2,5 puntos la rentabilidad del E (4%). Además, el A sólo supera en 1,5 puntos al C y en menos de 1 al B.

Donde sí se amplían las diferencias es en la rentabilidad entre las AFP en los últimos doce meses. La más nueva (partió hace dos años) y barata (cobra de comisión un 0,77% del sueldo bruto), Modelo, saca fuertes diferencias con algunas de sus competidoras, particularmente en los Fondos D y E.

Precismente en el Fondo E, Modelo gana 3,96% en los últimos doce meses, mientras el promedio del Fondo en el sistema es de 2,5%. La mayor distancia la marca con AFP Capital, que ganó sólo 1,87%; el resto ganó entre 2,5% y 2,7%.

En el D, AFP Modelo (3,43%) triplica a Capital (0,97%) y más de que duplica a Cuprum (1,32%) y Provida (1,40%). En el A y el B Modelo y Planvital son las únicas con números azules en el último año.

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