Uno es considerado el genio -o tirano- detrás del astronómico auge de la compañía de la manzana mordida. El otro, es indicado como el continuador del trabajo de Jobs, pero una serie de decisiones arriesgadas y nuevos productos lo han hecho diferenciarse de su antecesor con éxito y mantener la senda de crecimiento de la empresa, al ser hoy en día la marca que registra mayores ganancias en la historia de Wall Street.