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Obama toma ventaja en las encuestas impulsado por la crisis financiera

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El postulante demócrata a la Casa Blanca supera por nueve puntos a su rival republicano John McCain. El resultado, de cara a los comicios del 4 de noviembre, se produce en momentos que el 50 por ciento del electorado norteamericano considera la situación económica como el asunto que más le preocupa, cifra que llegaba sólo a 37 por ciento hace sólo dos semanas.



El candidato demócrata a la Casa Blanca, Barack Obama, aparece por primera vez este miércoles en las encuestas con una clara ventaja frente al republicano John McCain en vísperas de su primer debate en esta campaña electoral en EE.UU.



El sondeo conjunto del diario «The Washington Post» y la cadena de televisión ABC muestra que Obama tiene nueve puntos de ventaja (52 por ciento frente al 43 de McCain) entre unos votantes angustiados con la crisis financiera del país.



Obama recuperó la semana pasada la ligera ventaja que McCain le había arrebatado tras la Convención Republicana. Hasta hoy, sin embargo, la diferencia estaba dentro del margen de error, lo que hacía que ambos candidatos estuvieran técnicamente empatados.



Bill McInturff, encuestador republicano, restó hoy importancia a los nuevos datos al decir que la carrera por la presidencia sigue «dentro del margen de error» en la mayoría de los doce estados que se prevé sean decisivos en la cita con las urnas el 4 de noviembre.



«Cuando uno mira a esos doce estados, McCain tenía una ventaja de un punto la primera semana de septiembre, uno de desventaja la segunda y uno de desventaja hasta ayer, sorprendentemente estable», afirmó McInturff.



Sea como sea, parece claro que la crisis económica se ha convertido en aliada de las ambiciones presidenciales de Obama.



La situación económica, que ya aparecía como el asunto prioritario de los electores, ha reforzado su protagonismo: un 50 por ciento dice ahora que es el tema que más les preocupa, frente al 37 por ciento de hace dos semanas.



Y la mayoría (un 53 por ciento) dice confiar más en Obama que en McCain para lidiar con la peor crisis de los últimos 80 años.



De ahí que asesores de ambas campañas prevean que la economía salga a relucir el viernes en el primer debate, en Misisipi, a pesar de que el tema oficial es la política exterior.



«Siempre esperamos que se discutiese sobre comercio exterior y otros asuntos (económicos)», dijo Doug Holtz-Eakin, principal asesor económico de McCain, quien añadió que, dada la actual situación, es previsible que salgan a relucir preguntas adicionales sobre la crisis financiera, que tiene ya un perfil internacional.



«El senador está preparado para responder todo tipo de preguntas, independientemente del tema oficial del debate y esperamos la oportunidad de hacerlo», insistió Holtz-Eakin en referencia a McCain, quien reconoció durante un momento de la campaña no entender mucho de economía.



Similares expectativas tienen los asesores de Obama.



«Estoy totalmente convencido que el asunto que está en estos momentos en la mente de todos los estadounidenses se discutirá el viernes en el debate», dijo Brian Deese, subdirector económico de la campaña de Obama.



Debate en torno a la política exterior



Pese al esperado desembarco de la economía en el primero de los tres debates presidenciales acordados, el plato fuerte de la jornada será la política exterior.



Se prevé que la guerra de Irak, uno de los puntos de desencuentro entre los dos candidatos, acapare buena parte del protagonismo.



McCain fue uno de los principales defensores de la invasión del país árabe en el 2003 y uno de los partidarios de que se enviasen este año tropas adicionales a la zona.



El senador cree que las tropas de combate deberían de permanecer en Irak hasta que la situación se estabilice y el gobierno iraquí se haya hecho con el control de la situación. McCain ha pronosticado que la mayoría de las tropas estarán de vuelta en EE.UU. el 2013.



Obama se opuso a la decisión de invadir Irak y ha prometido que comenzará a retirar tropas, a un ritmo de un batallón por mes, si llega a la Casa Blanca, con el objetivo de finalizar la retirada en el plazo de 16 meses.



Ambas campañas esperan también que las diferencias en comercio exterior entre los dos candidatos (McCain es un entusiasta defensor del libre comercio, mientras que Obama es más proteccionista) formen parte del debate.



A eso se sumaría la situación en Irán, Afganistán y Corea del Norte, así como las relaciones con Rusia, China y Latinoamérica, entre otros.



Los asesores de Obama indicaron que el senador buscará vincular a McCain con la fallida política exterior del actual inquilino de la Casa Blanca, George W. Bush.



Los asesores de McCain quieren poner de manifiesto las diferencias entre él y Obama en Irak, comercio exterior y la visión de los dos candidatos para tratar con aliados y enemigos.



Obama ha dicho durante su campaña que, si se hacen preparativos serios, está dispuesto a reunirse con líderes de países como Irán, Cuba, Corea del Norte o Venezuela, algo a lo que se opone tajantemente McCain.



EFE

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