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Estresando la encuesta UDD–La Segunda

Camilo Feres
Por : Camilo Feres Consultor en Estrategia y AA.PP.
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El piso de la derecha es más bajo con los candidatos “de partido”.

El fenómeno es particularmente complejo para Longueira y Allamand, ya que su respaldo está muy cercano al que muestra la adhesión al Gobierno y mientras para éste último, el tiempo no es un factor (es razonable pensar que su respaldo debería comenzar a mejorar paulatinamente), para los candidatos no hay tanto margen.

Golborne es más competitivo frente a la mejor carta opositora (Bachelet) y muestra una adhesión mayor a la que despierta hoy el Gobierno del cual forma parte. Es decir, tiene mayor capital que los partidos, que el Gobierno y que el resto de los aspirantes de su sector… Este hecho no pasa colado en las definiciones fotográficas de los candidatos a las próximas elecciones municipales, mucho menos lo hará en el caso de las cartas parlamentarias.

MEO se afianza en el eje centro-izquierda, Parisi come en la Derecha

La adhesión al candidato del PRO se mantiene prácticamente inalterada sin importar la configuración de alternativas que se testee en la encuesta. Los votos que pierde Allamand y Longueira, respecto de Golborne en las simulaciones, se reparten entre Bachelet, Indecisos y Franco Parisi.

Respecto de éste último, podría comenzar a instalarse la idea de una candidatura funcional a la contención del “voto blando” de derecha en una primera vuelta.

Las primarias menos competitivas son también menos atractivas

Más personas se muestran dispuestas a votar en una primaria de la Alianza (76%) que en una de la Concertación (67%). En la oposición, con una candidata que en ese escenario muestra una intención de voto “aplastante” (79%) respecto de sus eventuales contendores, la percepción respecto a lo que está en juego es menor que lo que se percibe en la Alianza, donde las preferencias se distribuyen en cantidades menos indecorosas (43, 27 y 20, por ciento).

Hay voluntad de voto

Un 67% de los encuestados manifestó que era seguro o muy probable que asistiere a votar en las próximas elecciones municipales. Sólo un 8% afirma tener decidido no hacerlo de ningún modo. Con esta predisposición, el trabajo de identificación de los potenciales votantes del nuevo padrón se vuelve un componente clave en la efectividad de las estrategias electorales locales… A ponerse a cruzar bases de datos!!!

Lo evidente

Bachelet y Golborne son las cartas más competitivas de cada bloque “tradicional” (Concertación–Alianza) por lo que, más allá de la polarización de la agenda política tradicional, el votante moderado será, casi sin lugar a dudas, el gran elector de la próxima elección presidencial.

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