Opinión
Un estudio realizado en la Escuela de Ingeniería de Construcción y Transporte (ICT) de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso ha demostrado que los siniestros de tránsito son influenciados por cuatro factores principales.
Al igual que en otros países y ciudades en el mundo, actualmente existe un problema de transporte de gran magnitud en nuestro país y es el número de fallecidos en siniestros de tránsito.
De acuerdo con los registros de la Comisión Nacional de Seguridad del Tránsito (Conaset), en los últimos diez años la cantidad de personas fallecidas en calles y carreteras ha estado en el rango de los 1500 a 2500 anualmente, representando un tema no solo de transporte sino también de salud pública que requiere urgentemente ser intervenido.
Un estudio realizado en la Escuela de Ingeniería de Construcción y Transporte (ICT) de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso ha demostrado que los siniestros de tránsito son influenciados por cuatro factores principales:
-El primero de ellos es la infraestructura vial, considerando el diseño geométrico y su estado, entre otros.
-El siguiente elemento es el comportamiento de los usuarios, es decir, pasajeros, peatones y conductores, y en estos últimos es importante estimar el tiempo de reacción y de frenado frente a situaciones puntuales.
-Lo anterior se ve impactado por otro factor como es el clima, el cual afecta la conducción, puesto que no es lo mismo conducir en un día soleado que uno lluvioso, donde el pavimento está húmedo.
-Y, por último, la información disponible en la ruta es relevante si observamos las señales verticales, demarcaciones, semáforos y mensajería variable, entre otros.
Para poder relacionar estos factores, se realizó un mapa de concentración de siniestros de tránsito en el Gran Valparaíso usando la herramienta de Sistemas de Información Geográfica (SIG), a partir de las rutas por las que transita el transporte público. Se observa que la mayor densidad de siniestros se produce donde hay mayores rutas de transporte público, lo que se debe a los conflictos entre conductores, pasajeros y peatones con el entorno urbano.
Por ejemplo, en calles como Av. España los buses alcanzan velocidades cercanas a los 100 km/h, en circunstancias que no está diseñada para esa velocidad, generando un mayor riesgo de provocar un siniestro.
Este sistema es una herramienta valiosa para estudiar las relaciones en las rutas y analizar fenómenos cotidianos, como los siniestros viales, los cuales es posible prevenir tomando en cuenta la información disponible para gestionar el uso de las vías.
Por lo tanto, SIG representa un instrumento útil para autoridades y profesionales del área, quienes pueden conocer y aprovechar su potencial para el desarrollo de proyectos de transporte y movilidad que impacten de manera positiva en la vida de las personas.
En este contexto, la ICT de la PUCV ofrece diversos programas de estudios, entre ellos, cursos, diplomados y magíster que desarrollan habilidades y competencias para el análisis de sistemas de transporte y movilidad mediante el uso de herramientas y software para comprender y solucionar problemas de alta complejidad en la materia. En este sentido, es importante que tanto profesionales del sector público como privado actualicen sus conocimientos y herramientas, para mejorar los procesos de toma de decisión con respecto a la mejora de calidad de vida de las ciudades.
