Tras el debate por el mea culpa de Boric como diputado opositor a Piñera, el foco de las miradas ha girado a los desencuentros entre el expresidente y Chile Vamos. “Creo que hubo una debilidad en la coalición, en la lealtad que se le pedía desde el Gobierno”, dice el exabanderado Sebastián Sichel.
A una semana del funeral del exmandatario Sebastián Piñera, y de la polémica de La Moneda con el PC y el Frente Amplio por el discurso del Presidente Boric, donde señaló que como oposición al gobierno del fallecido mandatario las querellas y las recriminaciones llegaron “más allá de lo justo y razonable”, los focos se han trasladado ahora a Chile Vamos, por la retahíla de episodios en los que el bloque -entonces oficialista- se distanció del gobernante en sus momentos más críticos y de peor evaluación política.
“Muchas veces en plena crisis social, incluso en el tema del retiro, Chile Vamos en vez de actuar unida como coalición, hubo algunos que estuvieron por resolver su propia elección o su propia posición, más que por defender al gobierno del expresidente Piñera. Yo creo que hay una debilidad en la coalición en la lealtad que se le pedía desde el Gobierno”, asegura a El Mostrador Sebastián Sichel, exministro de Desarrollo Social de Piñera y excandidato presidencial de Chile Vamos.
Y Sichel agrega: “Creo que se debería, más que hacer un mea culpa, hacer una reflexión interna. Una reflexión interna respecto a cómo en momentos de crisis lo que hay que hacer es fortalecer el colectivo y no cada uno tratar de rascarse con sus problemas. Creo que ese fue parte del pecado de Chile Vamos, en la crisis social, de algunos actores de Chile Vamos”.
Al interior de Chile Vamos, exministros y parlamentarios del bloque, que hoy es de oposición a Boric, recuerdan que la lista de desencuentros entre Piñera y los partidos comenzó en enero de 2018, mientras elaboraba la nómina de hombres y mujeres para integrar el Gabinete. En ese momento, se viralizó un WhatsApp con los supuestos nombres que ocuparían cada cartera. En la lista iba Andrés Chadwick, Cristián Monckeberg, Alberto Espina, Hernán Larraín y Cecilia Pérez.
Tras el mensaje, Piñera manifestó su molestia de inmediato: canceló su asistencia a una cena de con los parlamentarios de Renovación Nacional electos, y no concurrió al Consejo General de la UDI al día siguiente.
Sin embargo, explican que las diferencias más duras fueron por el matrimonio igualitario, el rol de los militares para el estallido social, la Ley de identidad de género, cuando la entonces presidenta de la UDI, Jacqueline van Rysselberghe, definió congelar su participación en Chile Vamos por diferencias en paridad de género, escaños reservados y de independientes en el proyecto de la fracasada Convención Constitucional en diciembre de 2020, tras el Acuerdo por La Paz, y los tres retiros del 10% de las AFP apoyados por sus legisladores.
Luego del mea culpa de Boric, en la derecha han surgido voces que apuntan a la necesidad de que, pasado el duelo, el bloque busque una autocrítica por su relación con el exmandatario. Por ejemplo en esa línea se muestra la ex subsecretaria de Salud, Paula Daza, posiblemente el rostro más emblemático del piñerismo durante la pandemia.
“Aún estamos con el duelo del expresidente Piñera. Ya habrá espacios para poder analizar con más detalle lo que vivimos en los momentos más duros (…) Primero en el estallido social, después en la pandemia, momentos donde claramente tuvimos que tomar medidas muy difíciles. Y yo creo que cada uno podrá reflexionar en su interior para saber cuán solo dejó al expresidente Piñera. En este minuto, yo creo que todavía tenemos que reflexionar en el duelo, por la pérdida de una persona que yo valoro como persona y como Presidente de la República. Y segundo, nos da una cierta confianza de que se ha valorado lo que fueron sus principios democráticos, su intención de poner al sector público por sobre todo y tomar las medidas. Por lo tanto, más allá, sobre lo que hizo Chile Vamos, creo cada uno de los partidos que tendrá que analizar y las personas que participaron en el proyecto político”, manifiesta la Daza a El Mostrador.
En las lecturas de analistas políticos y dirigentes del sector sugieren como reflexión que la principal derrota política de Piñera no provino desde el Frente Amplio ni de su oposición, sino que fue obra de sus parlamentarios en el Congreso, cuando aprobaron los retiros previsionales mediante una reforma constitucional que constituía un misil a las prerrogativas presidenciales y creaba una especie de “parlamentarismo de facto”, avalado por parlamentarios oficialistas, que habían sido electos sacándose fotos con Piñera.
“El presidente perdió el tercio en el Parlamento, que es el principal escudo institucional de un mandatario. No estoy seguro de que la derecha haya reflexionado suficientemente sobre ese hecho fundamental de su historia reciente”, señala una fuente del sector.
En julio de 2020, la aprobación en la Sala de la Cámara de Diputados del proyecto de segundo retiro del 10% de los fondos de AFP fue un duro golpe para La Moneda. Piñera puso a todo su equipo político a trabajar para contener la fuga de votos de Chile Vamos, liderados por los ministros Gonzalo Blumel e Ignacio Briones, pero fue imposible: de los 64 diputados de la coalición, solo 25 rechazó la moción. Según expersoneros oficialistas, el resultado dejó a La Moneda en una posición debilitada y la idea de que al interior de Chile Vamos reinaba el “desgobierno”.
Varios parlamentarios que votaron a favor prefirieron guardar silencio para este artículo. Sí lo hizo el diputado por Viña del Mar Andrés Longton (RN), quien se abstuvo en la votación del primer 10% de AFP, respaldó el segundo retiro, pero votó a favor de las dos mociones más liberales de Piñera: el matrimonio igualitario y la ley de identidad de género.
“Creo que siempre es bueno reflexionar, respecto a la unidad en momentos de crisis, donde quizás es más tentador privilegiar el interés personal electoral que mantener una línea respecto a ciertas iniciativas que son necesarias para el país. Y en ese sentido vivimos tiempos con una vorágine muy intensa en los años del segundo periodo del Presidente Piñera. Eso obviamente generó un desorden respecto a algunas iniciativas que quizás en tiempos de mayor tranquilidad social no se hubieran producido. La gran virtud de las coaliciones que se han mantenido unidas en nuestro país es que han logrado dar gobernabilidad a Chile. Y eso obviamente es una lección que en Chile Vamos tenemos que sopesar. Obviamente que esas reflexiones siempre llegan después de hechos consumados, quizás atesorando aquellas iniciativas que, si se hubiera pensado colectivamente el gobierno del Presidente Piñera hubiera salido más fortalecido. El tiempo empieza a ordenar las cosas”, evalúa el diputado Longton.
Uno de sus pares de la UDI, que prefiere reserva de su nombre, señala que “puede haber un momento en que los que votamos a favor de los primeros retiros hagamos una autocrítica, pero eran medidas desesperadas que pedía la gente. En los temas valóricos no le puedes exigir el voto a un diputado por un tema de conciencia. Ahora, para el estallido social, debimos fortalecer mejor al gobierno”, sostiene.
En el caso del matrimonio igualitario, que estaba en el programa de Gobierno de Piñera, el 21 de julio de 2021, el Senado lo aprobó por 28 votos a favor y 14 en contra la iniciativa. Se trataba de un proyecto al que Piñera puso “suma urgencia” a comienzos de junio y abrió un debate en el bloque oficialista. En el Senado, los 21 senadores de Chile Vamos presentes en la sala, sólo 4 votaron a favor: Marcela Sabat, Rodrigo Galilea, Felipe Kast y Rafael Prohens.
El senador Prohens (RN) es considerado uno de los legisladores más disciplinados en los 4 años de ese gobierno. El parlamentario votó en contra de los retiros, y a favor del Matrimonio Igualitario y de la moción de identidad de género. También aprobó todo lo que el Ejecutivo presentó para el estallido social.
“Quienes deben hacer la reflexión deben ser aquellos que apoyaron normas inadmisibles y que la sala aprobaba porque la oposición tenía mayoría”, dice el senador Prohens a EL Mostrador.
“Los parlamentarios de Chile Vamos, que se subieron a ese carro son los que deben reflexionar y dar explicaciones, si así lo consideran. En esos casos fueron algunos parlamentarios que votaron en contra del Gobierno, pero esos pocos daban la mayoría. Ellos deben reflexionar sobre lo que estamos viviendo hoy con la economía y desempleo. Se les advirtió en esas oportunidades y no escucharon. Los efectos negativos (de los retiros), hoy están a la vista”, concluye el legislador de RN.