Problemas para pagar sueldos, los gastos básicos e incluso el cierre de una sede, son algunas de las consecuencias que enfrentan los CFT e Institutos Profesionales porque aún no reciben los recursos que la cartera de Joaquín Lavín debe pagarles por los 70 mil alumnos beneficiados con la beca. Desde el Mineduc señalan que tienen plazo legal hasta el 31 de diciembre, y que el terremoto fue el que demoró todo el proceso.
Luego de 14 años de funcionamiento, la sede de Temuco del Centro de Formación Técnica de Osorno deberá cerrar sus puertas. A partir de 2012, sólo los antiguos alumnos continuarán asistiendo hasta terminar la promoción, ya que la alta competencia y problemas financieros han hecho poco rentable el mantenimiento de la institución.
Un factor decisivo en esta decisión, es el atraso en el pago de la Beca Nuevo Milenio que anualmente entrega el Ministerio de Educación (Mineduc) a los Centros de Formación Técnica (CFT) e Institutos Profesionales (IP).
En general, estos recursos son entregados entre agosto y septiembre de cada año, pero hasta ahora aún no han sido repartidos a ninguno de los CFT e IP que aún esperan los 18 mil millones de pesos que permitirán pagar los aranceles de 70 mil beneficiarios. Porque esta beca, destinada a estudiantes que hayan egresado de establecimientos de enseñanza media municipalizados, particulares subvencionados o corporaciones de administración delegada, y que cubre hasta 500 mil pesos del arancel anual, se entrega directamente a los centros de estudio, no a los alumnos.
Por ello, el atraso perjudica a las instituciones directamente, en especial a las más pequeñas y con mayor número de becados. Según la representante legal del Centro de Osorno, Gloria Vera, “obviamente esto nos ha perjudicado mucho, ya que no podemos afrontar nuestros compromisos. Especialmente las instituciones más chicas, con alumnos de escasos recursos que salen beneficiados con la beca porque dejan de cancelar, así que mientras el Estado no nos pague no contamos con esos aranceles”.
Vera explica que “siempre hemos reclamado que se paga muy tarde. El Mineduc nos obliga a no cobrarles a los alumnos pero no ve que tenemos que mantener desde marzo hasta la fecha esos aranceles que no son pagados. Este atraso nos extraña bastante, ya que son presupuestos aprobados desde el año pasado y hasta ahora no hay respuesta del ministerio”.
[cita]La situación se repite en todo el país. Incluso, hay casos en que tienen problemas para cancelar los gastos básicos. Y si no se resuelve la situación a la brevedad hay quienes en noviembre ya no tendrán dinero para pagar los sueldos.[/cita]
Para el CFT Los Fundadores de La Serena, los casi 23 millones de pesos que aún no reciben por concepto de la Beca Nuevo Milenio, es un grave problema: de sus 150 estudiantes, cerca del 40 por ciento están becados.
El rector de Los Fundadores, José Suazo, señala que hay bastante preocupación al respecto, ya que “como el descuento se realiza una vez seleccionados los alumnos, cancelan una cuota inferior, lo que implica un ajuste al presupuesto del año, reordenando los pagos acorde a las fechas de cancelación del beneficio. Esto conlleva un endeudamiento en las obligaciones con proveedores, en el proyecto educativo, con los alumnos en relación a beneficios que se puedan otorgar y a su vez un alto grado de intereses y multas en desmedro de la institución”.
La situación se repite en todo el país. Incluso, hay casos en que tienen problemas para cancelar los gastos básicos. Y si no se resuelve la situación a la brevedad hay quienes en noviembre ya no tendrán dinero para pagar los sueldos. Así lo explica el presidente del Consejo Nacional de Instituciones Privadas de Educación Superior (Conifos), Ricardo Correa, que asegura que “a mi me ha llamado gente que tiene asignados casi 200 millones en becas. ¿Cómo lo hacen? Pues tienen que pedir créditos. De esta forma si se asignan 500 mil pesos por un becado, en la práctica recibirán menos por los intereses que deben pagar”.
Por ello, Correa asegura que “creemos que la beca debe asignarse y pagarse con tiempo. Toda institución pequeña se resiente porque la plata no llega, por lo que es necesario asignar más rápidamente el beneficio, que es del alumno”.
En el Mineduc están al tanto de la situación.
En septiembre, la directiva de Conifos se reunió con el ministro de la cartera, Joaquín Lavín, al que, entre otros puntos, le plantearon la delicada situación.
“Él no sabía, así que inmediatamente llamó y preguntó por qué no se había pagado. Dijo que pagarían en octubre pero aún no pasa nada”, explica Correa, que añade que “con esto se está perjudicando a un montón de personas e instituciones”.
El encargado de la División de Educación Superior (Divesup), Juan José Ugarte, señala que “el plazo legal para pagar estas becas vence el 31 de diciembre, así que no estamos atrasados. Pero evidentemente es necesario adelantar el proceso”.
El arquitecto, explica que la demora en los pagos está ligada al terremoto, ya que “el término del proceso operativo terminó en agosto, debido a un aplazamiento de seis semanas en el envío de la información que mandan desde los Centros de Formación Técnica. A eso se suma que hubo inconsistencia de parte de la información recibida, lo que alargó más el cierre del proceso”.
Luego, añade, “pasa a la tramitación del pago que toma entre 30 o 60 días”.
Por otra parte, es necesario tramitar el reglamento que ejecuta la ley de ayudas estudiantiles. Según Ugarte “hasta la fecha se habían tramitado reglamentos nuevos anualmente para cada ley de ayudas estudiantiles. De aquí en adelante ya no será así, porque lo cambiamos: agregamos a la glosa presupuestaria el concepto de que estas ayudas se ejecutarán de acuerdo al reglamento del año anterior y sólo se verán las modificaciones. Con eso estimamos que tendremos el proceso cerrado dentro del primer semestre porque será mucho más ágil”.
Pero este año los CFT deberán continuar esperando, ya que el ex vicerrector Académico de la Universidad Católica, estima que los pagos se podrán realizar recién entre fines de noviembre y los primeros días de diciembre.
