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Asociación Nacional de Magistrados celebró elecciones para renovar su directiva nacional

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El proceso se resolvió por estrecho margen a favor de la lista Justicia, Unidad y Pluralismo (JUP), representante de la continuidad en la gestión de la asociación. Sin embargo la lista que agrupó a los llamados jueces garantistas de la corriente Jurisdicción y Democracia (JyD), obtuvo significativas victorias en varias regiones, entre ellas Santiago, y experimentó un sólido crecimiento a un 45% del electorado nacional.


Este fin de semana se produjo la renovación de la directiva de la Asociación Nacional de Magistrados (ANM), una corporación de derecho privado fundada en 1968 que agrupa a cerca de 1.300 jueces pertenecientes al Escalafón Primario del Poder Judicial del país.

El hecho tiene especial relevancia pues dicha contienda se dio en un ambiente nacional previamente marcado por fuertes críticas del gobierno a la acción de la justicia, trayendo, por instantes de manera virulenta, a la agenda pública el tema de la autonomía del poder jurisdiccional en un régimen democrático.

La elección, al final, se resolvió por estrecho margen a favor de la lista “Justicia, Unidad y Pluralismo” (JUP), representante de la continuidad en la gestión de la asociación.  Sin embargo la lista  que agrupó a los llamados jueces garantistas de la corriente “Jurisdicción y Democracia” (JyD), obtuvo significativas victorias en varias regiones, entre ellas Santiago,  y experimentó un sólido crecimiento a un 45% del electorado nacional. Esta corriente sostiene desde hace tiempo una propuesta fuertemente modernizadora del Poder Judicial, y, de hecho, una de sus representantes a la directiva nacional en esta elección, María Francisca Zapata, obtuvo solo 10 votos menos que el ministro de la Corte de Apelaciones de Arica Rodrigo Cerda, quien será seguramente proclamado como el presidente por los dos próximos años.

 

Cabe hacer notar que todos los candidatos de esta lista JyD, antes de postular, asumieron un compromiso de no postular a cargos del escalafón judicial por los dos años que dura el mandato y otros dos posteriores al mismo.  Además de Francisco Llanos, Rodrigo cerda y Francisca Zapata, las siguientes mayorías fueron para la jueza Nancy Bluck, también de JyD, Ana María Osorio (JUP), Cecilia Vega (JUP), Álvaro Flores (JyD), Leopoldo Vera (JUP) y Patricio Souza (JyD).

 

La directiva para los próximos dos años quedó conformada entonces por cinco integrantes de JUP y cuatro de JyD.

 

Conservadores versus autonomistas

 

Fue el saliente presidente de la ANM, Leopoldo Llanos, quien se refirió a la tensión que ronda el mundo de los tribunales frente a lo que muchos consideran una indebida presión del poder político, y respecto de lo cual la Asociación ha hecho poco.

 

Llanos, aclaró, en declaraciones a El Mercurio, que no considera «conservadora» el ala que representa y de la cual el eventual nuevo presidente Rodrigo Cerda es cercano. «No es que seamos un grupo conservador como se nos ha tildado” declaró a El Mercurio,  “No tenemos diferencias sustanciales con el otro grupo, sólo la metodología y forma de enfrentar distintas situaciones»,  concluyendo que coinciden en los cambios al sistema disciplinario y a la  labor jurisdiccional de los jueces.

 

El grupo  «Jurisdicción y Democracia», mantiene, en cambio, desde sus orígenes el año 2006, en que compitieron por primera vez, una fuerte identificación con la independencia del poder jurisdiccional. Siempre se ha planteado como “un equipo de trabajo que gira en torno a ideas”; donde las personas son más bien circunstanciales porque el énfasis está dado en torno a temas como “la creación de la Unidad de Defensa de la Independencia Judicial (externa e interna) y Oficina Parlamentaria (coordinadora de proyectos de ley de interés del servicio)” además de formación profesional y una política comunicacional “asertiva y coordinada con la comunidad académica para instar por la las reformas orgánicas”.

 

Esta corriente desde sus inicios ha enfrentado abiertamente lo que sus miembros consideran intromisiones indebidas del poder político. Ya el año 2007, la magistrada Maria Francisca Zapata, en un inédito foro con parlamentarios, sostuvo que “Entre la ley y el juez no debe haber interferencias de ningún tipo, ni semánticas políticas, ni exigencias de la mayoría, ni estridencias mediáticas».

 

Tal aseveración estaba dirigida al Senador de RN Alberto Espina quien había dicho poco antes: «Ustedes (los jueces) tienen gran culpa del clima de intranquilidad, inseguridad y temor que la población tiene, (…) porque

(han) dejado libres a delincuentes peligrosos que han seguido cometiendo delitos, y que han causado un grave daño».

 

Los resultados finales de la elección son un indicador importante de cierta tensión que el gobierno, a través del Ministerio de Justicia, debiera evaluar y valorar adecuadamente. La lista garantista, aunque le fue mal en algunas regiones y lugares, obtuvo un sólido 45% de la votación nacional, 10 puntos más respecto de elecciones anteriores, cuatro directores nacionales Nancy Bluck, Álvaro Flores, Patricio Souza y María Francisca Zapata, una extraordinaria votación en el Centro de Justicia de Santiago, Valdivia-Osorno, Puerto Montt-Chiloé y San Miguel, y fuertes alzas en Punta Arenas, Temuco, La Serena y Valparaíso.

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