El presidente del máximo tribunal del país, Rubén Ballesteros, recalcó que la Tercera Sala, cumpliendo sus funciones y aplicando la ley, estimó que hay una irregularidad en los procedimientos de las instituciones de salud previsional y «esa sala cada vez que resuelva situaciones de esa clase va a resolver de la misma forma. No puede un día hacerlo de una manera y otro de otra». Situación que —a su parecer— no necesariamente va a marcar un precedente respecto de causas futuras.
El presidente de la Corte Suprema, Rubén Ballesteros, aseguró que sus fallos en contra de las Isapres no necesariamente van a marcar un precedente respecto de causas futuras. El martes 8 de enero la Tercera Sala del máximo tribunal del país, presidida por el ministro Sergio Muñoz, asestó un golpe a través de 30 fallos que determinaban que las Isapres no pueden aumentar unilateralmente sus planes de salud.
En entrevista con Radio Cooperativa, Ballesteros aseguró que las acciones judiciales contra las administradoras privadas «son situaciones que se están viendo con mucha frecuencia. Fueron más de 30 recursos de protección los que se fallaron, pero los que están llegando a la Corte Suprema en definitiva, desde las Cortes de Apelaciones, son miles en el año».
«La Sala Constitucional (la Tercera Sala de la Corte Suprema), cumpliendo sus funciones y aplicando la ley —en este caso, especialmente la Constitución Política de la República, que también es un ordenamiento que debe aplicarse en cualquiera situación de juicio— ha estimado que hay una irregularidad en los procedimientos de las Isapres, así lo ha declarado en juicio, y esa sala cada vez que resuelva situaciones de esa clase va a resolver de la misma forma. No puede un día hacerlo de una manera y otro de otra», acotó.
«Ahora, si eso es un precedente —dijo el presidente de la Corte Suprema— dependerá de si va a influir o no en los jueces de las Cortes de Apelaciones».
«Los jueces son independientes absolutamente para resolver; sí, desde luego, dentro de los cánones de la ley y de la Constitución. Su independencia va a que no puede ser influido de ninguna forma para resolver de una manera u otra. El juez resuelve de acuerdo a lo que le permiten la ley y la Constitución», concluyó.
Por su parte, el mencionado ministro Sergio Muñoz, en su calidad de coordinador de la Cumbre Judicial Celac-UE (que se realiza en Santiago este 10 y 11 de enero), resaltó la importancia de establecer una instancia de cooperación internacional.
A través de una columna publicada en La Tercera, el magistrado expresó: «Las materias que se aborden, las posibles soluciones y la manera en que éstas se enfrenten permitirán cambiar positivamente la forma y los tiempos en que se administra justicia al interior de los países. Al tener presente esta finalidad, se incorpora a la persona como centro de las preocupaciones, se trabaja en su beneficio buscando mejoras en la administración de justicia y, por lo mismo, en su calidad. Además, legitima las aspiraciones, los esfuerzos y recursos invertidos en la constitución de esta red, objetivo principal de la reunión».
«Concretamente, la asistencia judicial internacional, consistente en la forma como se entienden los tribunales de los distintos países en los requerimientos que se formulan (exhortos, exequátur, extradiciones, etc.), se ha estimado procedente establecerla como eje de este encuentro, puesto que constituye una preocupación común de los jueces. Es un aspecto a mejorar, por lo que será el primer planteamiento a los jefes de Estado y de gobierno de la cumbre», añadió.
«Aspiramos a un acuerdo en términos tales que la forma de entender la cooperación y la integración birregional de los poderes judiciales se transforme luego de este encuentro. De la misma manera, se anhela que culminadas estas jornadas, en el futuro nazcan nuevos e importantes desafíos a proponer a nuestros gobernantes, los que serán materia de próximas discusiones. También esperamos tener respuesta de los gobernantes e iniciar un diálogo constructivo y permanente, puesto que el perfeccionamiento de la justicia lleva a mejorar nuestros estados y la democracia. Hablar de integración es hablar de entendimiento, superar realidades nacionales, sin desconocer sus particularidades esenciales. Este es el desafío que se afronta y para lo cual se ha organizado esta primera cumbre judicial, tarea en la cual se ha tenido el apoyo del gobierno, y en que han participado con entusiasmo las máximas autoridades judiciales de ambas regiones», concluyó Muñoz.
