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Cohecho: la carta en que Julio Dittborn (UDI) apuntaba a  Jorge Insunza y que El Mercurio no publicó Ex subsecretario de Piñera destacaba desigualdad de trato de la Justicia con la derecha a propósito de prisión de Orpis

Cohecho: la carta en que Julio Dittborn (UDI) apuntaba a Jorge Insunza y que El Mercurio no publicó

«En ese y en otros casos en que los hechos afectan a integrantes o amigos del gobierno, los representantes de las Fiscalías y del Consejo de Defensa del Estado miran para el lado. Pareciera que existen dos justicias en Chile. Una que trata con dureza a los opositores y otra que actúa blandamente con los integrantes de la Nueva Mayoría», afirma la misiva, en línea con los cuestionamientos que hizo Hernán Larraín.


Desde que  personas de la Nueva Mayoría se han visto involucradas en los casos de financiamiento irregular de la política, la oposición, que inauguró la tendencia con el caso Penta, ha acusado un trato desigual hacia sus militantes por parte de los organismos competentes, tanto el Servicio de Impuestos Internos como el Ministerio Público.

Desde que la Corte de Apelaciones dejó con prisión preventiva a Jaime Orpis, por los delitos asociados a su trabajo como senador y la empresa Corpesca, esta crítica ha retomado fuerza.

Hoy, al visitar a Orpis, el presidente de la UDI, Hernán Larraín, aludió a Jorge Inzunza, el ex ministro de la Segpres, sobre quien se abrió una investigación por cohecho y cuya situación, al contrastarla con la del senador, Larraín consideró como una «injusticia».

Las palabras de Larraín habrían tenido mayor resonancia si las hubiera dicho el mismo día en que una carta del ex diputado Julio Dittborn, refiriéndose a lo mismo, esta vez con una referencia directa a Insunza, hubiera sido publicada por El Mercurio. Pero el periódico decidió no hacerlo.

Esta es la carta:

Señor Director:

El mismo día que tres ministros de la Corte de Apelaciones de Santiago decidieron que el senador Jaime Orpis debía ser sometido a prisión preventiva -a solicitud de dos fiscales y de la abogada del Consejo de Defensa del Estado- un Tribunal de Santiago decidía no aplicar esa medida cautelar a los imputados por el robo de subametralladoras y pistolas a una Comisaría de la comuna de Cerrillos. Según la Justicia, ellos no eran un peligro para la sociedad y el senador Jaime Orpis sí. Jaime Orpis ha reconocido que actuó al margen de las normas respecto al financiamiento de su campaña electoral y de las deudas derivadas de ella.

Para todos los parlamentarios esas infracciones prescriben en un año. Eso dice la ley. Pero Jaime Orpis reconoció hidalgamente que había quedado con una deuda electoral, cometiendo irregularidades en la forma de pagarla. Por ello, él está preso. Y varios parlamentarios y ex parlamentarios de oposición están formalizados, pero ninguno de la Nueva Mayoría, a pesar de que un ministro del gabinete de la Presidenta Michelle Bachelet – el ex diputado Jorge Insunza – debió renunciar por estar contratado por dos empresas mineras mientras era diputado y presidía la Comisión de Minería de la Cámara de Diputados. La prensa de la época afirmó textualmente que el ex ministro Insunza recibió 300 mil dólares a través de su empresa, Sistema Consultores, por asesorías realizadas a Codelco entre 1997 y 2014, mientras era diputado y Presidente de la Comisión de Mineria.

Una vez que se conocieron los pagos, admitió además que había elaborado informes para Antofagasta Minerals, otra empresa minera privada. En ese y en otros casos en que los hechos afectan a integrantes o amigos del gobierno, los representantes de las Fiscalías y del Consejo de Defensa del Estado miran para el lado

 Pareciera que existen dos justicias en Chile. Una que trata con dureza a los opositores y otra que actúa blandamente con los integrantes de la Nueva Mayoría. Jaime Orpis es una víctima simbólica de esa desigualdad de trato. Jaime es un hombre bueno que cometió infracciones normativas que ha reconocido y está dispuesto a asumir. No es un peligro para la sociedad, como lo prueban su increíble labor ayudando a jóvenes drogadictos y sus mas de tres décadas de servicio publico. Tenerlo preso no solo es injusto. Es inequitativo y cruel y nos acerca a la justicia chavista: durísima e implacable para los opositores y temerosa con los que gobiernan.

Julio Dittborn Cordua»

 

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