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Cáncer de mama: «En Chile hay más casos de los que se cree» Agenda País

Cáncer de mama: «En Chile hay más casos de los que se cree»

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Loreto Santibáñez
Por : Loreto Santibáñez Editora de Agenda País y Revista Jengibre. Periodista UC
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Estudio reveló la real dimensión del impacto del cáncer de mama en Chile, el subdiagnóstico y la urgente necesidad del uso de metodologías diagnósticas como la mamografía, entre otros hallazgos.


El estudio “Cambiando el Futuro de las Mujeres Chilenas”, elaborado por L.E.K. Consulting y patrocinado por Laboratorio Roche Chile, dejó en evidencia importantes diferencias en la forma de cómo son diagnosticadas y tratadas las pacientes con cáncer de mama en algunas nuestro país.

El informe alerta que los diagnósticos positivos para cáncer de mama bordearían los 11.200 anualmente en el sistema público,
aunque la cobertura actual de mamografías solo permitiría pesquisar alrededor de la mitad de ellos, con diagnóstico de 5.393 casos nuevos por año.

La investigación, difundida en alianza con la Fundación Foro Nacional de Cáncer, contempló entrevistas a diferentes agentes del
ecosistema de salud, identificando 45 barreras que obstaculizan el acceso de las usuarias del servicio público de salud a las mamografías. Entre ellas, el hecho de que hoy no existe una política pública que incentive a solicitar una mamografía y tampoco se promueve entre los profesionales de la salud la posibilidad de reclutar a usuarias con potencial riesgo, como ocurre en enfermedades como el cáncer cérvico uterino con el papanicolaou o PAP.

Otra de las principales barreras identificadas es que muchos profesionales de atención primaria poseen una experiencia limitada con pacientes y escaso conocimiento de los protocolos de cáncer de mama, debido principalmente a una falta de capacitación.

Además, Chile carece de un registro nacional de pacientes con cáncer, lo que según el estudio limita una visión adecuada del estado epidemiológico en el país.

Para analizar el estudio, El Mostrador conversó con:

  • Fiorella Santos, country medical director de Roche Chile
  • Mauricio Franca, managing director, responsible for L.E.K.’s Healthcare practice in South America.
  • Paula Escobar, presidenta de la Sociedad de Mastología
  • Jorge Jimenez de la Jara, presidente de la Fundación Foro Nacional del Cáncer

Para comenzar, Mauricio Franca, director de la consultora L.E.K. para América Latina y uno de los autores del estudio, planteó que como no hay un Registro Nacional de Cáncer en nuestro país, querían «entender el tamaño del desafío del nacer de mama en Chile».

«Lo que hicimos nosotros fue primero verificar el número de casos de cáncer de mama en el país y aunque habían distintas estimaciones, la mayorías de las personas estaba de acuerdo en que eran entre 5 mil y 7 mil casos», explicó. «Y cuando haces los ajustes para lo que podría ser Chile considerando edad, perfiles y análisis encuentras números bastante más grandes de lo que se cree. Nosotros creemos que podría ser casi el doble».

Además de impactantes, para Jorge Jimenez de la Jara, presidente de la Fundación Foro Nacional del Cáncer, conocer esta cifra fue «una provocación al debate. Sabemos que todas las enfermedades que por su trascendencia médica y social tienen cifras que se discuten (…) pero en el caso del cáncer es mucho más obvio, porque el cáncer requiere un proceso y muchos casos aparecen en la fase 3 o 4″.

Atención primaria y control sano

La detección de un cáncer en etapa temprana es fundamental para un buen pronóstico y la atención primaria de salud cumple un rol importante. Pero existen importantes fallas en el sistema.

«Revisando las mallas curriculares de los profesionales de la salud, matronas, enfermeras y médicos hace poco, uno puede constatar de que la oncología y el cáncer de mama propiamente tal, que es uno de los cánceres más mediáticos y la principal causa de muerte en la mujer, no está incorporado como tal en los planes básicos de esas carreras», planteó Paula Escobar, presidenta de la Sociedad de Mastología.

La especialista reconoció que hay cierto conocimiento de la salud de la mujer y experiencia en protocolos y guías de derivación desde los consultorios hacia las unidades de patología mamaria, pero «se podría hacer mayor capacitación para manejar mejor la sintomatología de las mujeres y para poder interpretar los exámenes radiológicos cuando se solicitan para poder tener un mejor manejo de la enfermedad. Y lo otro que también se podría hacer, y sería muy bueno, es una especie de control sano de la mujer».

Además recordó que el GES para caer de mama está desde el 2005 y «cambió como tratamos a las mujeres y les damos más acceso. Pero este estudio nos está mostrado que hay un montón de pacientes que están quedando afuera de este programa, que parte desde que yo tengo que hacer la confirmación diagnóstica, no incluye el diagnóstico o la pesquisa precoz o el control sano de la mujer para ver si es que tiene alguna anomalía para derivarla a una unidad para descartar algo».

 Por su parte Fiorella Santos, country medical director de Roche Chile, comentó que si bien se «ha estado desarrollando soluciones para mejorar el acceso a la atención y brindar mejores resultados a las pacientes con cáncer de mama (…) todavía importantes barreras de acceso impiden que las mujeres reciban un diagnóstico y un tratamiento adecuado»

«La gran mayoría de las barreras está concentrada en los pasos iniciales del camino de las pacientes, en el bajo acceso al la mamografía es el principal problema que enfrentan las mujeres chilenas. Y aunque el nivel de infraestructura varía mucho en todo el país, parece haber una una falta de profesionales y lugares de atención en muchas regiones, y eso se traduce en  largas filas de espera y finalmente lleva a las pacientes a buscar ayuda solo cuando aparecen síntomas más graves», agregó.

Para Santos, «hoy no existe una política pública que incentive a solicitar una mamografía y tampoco se promueve entre los profesionales de salud la posibilidad de reclutar a las usuarias que tengan un potencial de riesgo. Eso ocurre en algunas otras enfermedades como el cáncer cérvico uterino, así que hay una falta de cultura de prevención de la población chilena y eso inhibe el diagnóstico precoz y reduce las posibilidades de cura».

Así, los resultados reflejados en el informe son fundamentales porque «alerta precisamente los grandes desafíos que enfrentamos en Chile para todos quienes componemos el ecosistema de salud y la necesidad de los esfuerzos colaborativos que puedan ayudar a avanzar en encontrar soluciones para todos y así construir un sistema de salud más sustentable y de valor».

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