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Colisionador de Hadrones inicia experimento en busca del Big Bang

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Comienza un experimento para recrear las condiciones de origen del Universo y entender mejor la física de partículas.


Los científicos que trabajan en el Gran Colisionador de Hadrones (LHC, por sus siglas en inglés), el experimento físico más grande del mundo, tienen previsto comenzar este martes una prueba que buscará recrear las condiciones del origen del Universo -luego del llamado Big Bang- y descubrir nuevos aspectos de su naturaleza intrínseca.

Harán chocar dos haces de partículas subatómicas con la esperanza de proporcionar ideas sobre algunas de las preguntas que no han podido ser respondidas en la física de partículas.

El LHC, cuyo costo de construcción fue de US$9.000 millones, se espera que finalmente empiece a producir resultados, 18 meses después de su puesta en funcionamiento luego de haber sufrido algunas roturas.

El experimento de la Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN, por sus siglas en francés) se ha retrasado varias horas debido a un problema con los haces.

En busca del bosón de Higgs

Durante el experimento, los científicos buscarán señales del bosón de Higgs, una partícula subatómica también llamada la «partícula de Dios» que es crucial para la comprensión actual de la física. La teoría indica que provee de masa a todo en el Universo.

Aunque se prevé su existencia, los científicos nunca la han encontrado, comenta Matt McGrath, especialista en ciencia de la BBC, desde Ginebra.

En esa ciudad suiza, en un túnel circular de 27 kilómetros de longitud, a 100 metros de profundidad bajo la frontera franco-suiza, se encuentra el LHC.

McGrath explica que los investigadores han estado trabajando en incrementar la energía contenida en los pequeños haces que recorren el túnel 11.000 veces por segundo.

Ahora el plan es cruzar los haces en diversos puntos del circuito para crear colisiones con cantidades récord de energía.

Años de análisis

Guido Tonelli, portavoz de los científicos que trabajan en uno de los detectores que seguirá los resultados de las partículas subatómicas, dijo que «el negocio de colisionar pequeños haces de partículas a altas energías no es fácil».

«Lograr que coincidan ha sido comparado con lanzar agujas a través del Océano Atlántico y hacer que choquen a mitad de camino. Los investigadores confían en que va a suceder. Y podría arrojar luz sobre algunas cuestiones muy profundas y difíciles de la física», agrega.

El LHC, dice Tonelli, «finalmente puede empezar a arrojar luz sobre esto temas, pero no esperen respuestas inmediatas. Las enormes cantidades de datos generados por la colisión de haces necesitan años de análisis antes de extraer conclusiones definitivas».

Conocido como «La máquina de Dios», el mayor acelerador de partículas del mundo ya triplicó la energía más intensa jamás alcanzada en sus preparativos para escudriñar los secretos del Universo.

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