Según señala la Asociación Chilena de Protección de la Familia, la falta de información respecto a la entrega de anticonceptivos, aumento en el precio de preservativos en el comercio formal y violencia sexual intradomiciliaria, son parte de los factores que han incrementado el embarazo en algunas mujeres de nuestro país.
La pandemia del Covid-19 llegó y llenó de cambios nuestro sistema de salud. La prioridad, son las personas afectadas por este virus, dejando a un lado muchas atenciones que, a la larga, pueden resultar en más de una complicación.
Es justamente lo que pasa con la salud reproductiva, que tiene a muchas mujeres sin poder acceder a sus métodos anticonceptivos de rutina, ya sea por falta de atención, información, falta de stock o por un aumento en el precio de estos, lo que ha resultado, en más de una ocasión, en un embrazo no deseado durante este tiempo de confinamiento.
En este escenario, la Asociación Chilena de Protección de la Familia (Aprofa), se encuentra realizando atenciones en línea para todas aquellas que busquen una orientación en cuanto a salud con igualdad de derechos. Dentro de las teleconsultas que más han recibido, están las que tienen relación con diagnósticos de embarazo y consejería por gestaciones no deseadas.
“Se ha visto durante el mes de mayo un aumento importante de mujeres para cambio de método anticonceptivo, como extracciones de implantes o inserciones de dispositivos intrauterinos, rechazadas desde la atención pública. Alteraciones de flujo menstrual también han sido consultas recurrentes, ya que la actual corriente de abandonar anticoncepción hormonal y retomar los métodos basados en autoconocimiento está ganando adeptas”, comenta María José Oyarzún, matrona de Aprofa.
A la falta de información de sus métodos, se suma el estrés de esta pandemia, que puede derivar en cambios hormonales y en estar más propensas a gestaciones no deseadas, si es que no se toman los resguardos correspondientes. Por otro lado, la violencia intradomiciliaria también incide en estos embarazos.
“Desde el área de proyectos con la página, se busca acercar la entrega de información general, de forma respetuosa confidencial y clara a las usuarias que requieran apoyo en temáticas de salud sexual, gestaciones no deseadas y métodos anticonceptivos”, aclara María José, agregando que se están realizando atenciones remotas por videollamadas con el fin de poder cubrir a la mayor cantidad de consultantes posibles.
En el caso de ser estrictamente necesario, se están haciendo visitas personales, tomando todos los resguardos exigidos por la ley, para efectuar procedimientos como cambios de métodos, toma de PAP, revisión ginecológica y controles prenatales, teniendo como apoyo la toma de ecografía para diagnóstico clínico. Se trabaja, además, con un mapa de redes de derivación, en caso de requerir atención especializada, pudiendo hacer contactos de forma interna con organizaciones, instituciones y personal que atienda con enfoque de derechos y con respeto.
Para la matrona, dentro de las políticas públicas, existen ciertas acciones que se deben realizar de manera urgente para cubrir este tipo de atenciones, sobre todo en lo que se refiere a la Ley IVE:
“Lo más urgente es que se definan lineamientos y protocolos a nivel ministerial para asegurar la provisión de servicios de salud sexual y salud reproductiva, que no dependan del criterio de los directivos municipales o de los centros de salud”, dijo la matrona, añadiendo que se deben activar las atenciones no presenciales, realizando entrega de información masiva acerca de cómo acceder y que se debería considerar la entrega domiciliaria de métodos anticonceptivos a aquellas mujeres que se pueda comprobar que utilizan el método de manera adecuada, mejorando el acceso, con el resguardo apropiado de procedimientos como inserción y extracción de DIU e implantes hormonales.
Finalmente también señaló que se debe detallar, con una campaña general, a cuáles servicios se puede acceder y de qué forma, abriendo la entrega de condones de pene y vagina a la población general y en el caso específico de la Ley IVE, “debe hacerse sensibilización a profesionales de salud y debe abrirse la posibilidad de atención presencial para que las consultantes puedan saber cómo acceder a utilizar las causales, además de tener derivación directa a nivel secundario”.