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Con un Lollapalooza 2017 a tablero vuelto cerró el festival la banda The Strokes

La banda estadounidense cerró ayer la séptima edición del Lollapalooza Chile con un espectáculo atípico, que empezó tan mal que obligó al grupo neoyorquino a ofrecer su mejor versión para contentar a las 80.000 personas que se congregaron en el Parque O’Higgins de Santiago.


En su séptima versión, la jornada se caracterizó por un line up nutrido de bandas que se encuentran en plena vigencia, más allá de los headliners Metallica y The Strokes, estando más orientada a la diversidad de posibilidades y gustos de los asistentes.

Desde el punk de Rancid y el Heavy Metal de Metallica, a través de la música indie y electrónica de bandas como The xx y Chainsmokers, el festival creado por Perry Farrell en 1991 como una feria itinerante para despedir a su banda Jane’s Addiction, partió su séptima versión con una vigorosa oferta de bandas que van desde las nacionales consagradas como Lucybell o los debutantes Rey Puesto, como destacados de la música nacional en la primera jornada.

Por el lado de la música electrónica, uno de los shows más esperados fue el de Marshmello, el misterioso Dj que se cubre el rostro con una especie de cubo de malvavisco desde que comenzó su carrera en 2015.

El Dj incendió el Movistar Arena con algunos de sus clásicos tales como “Me Know”, “Invincible”, “Keep It Mello,” y su más famosa remezcla “Where Are U Now,” by Jack U.

En cuanto a la oferta internacional, lo imperdible estuvo en las manos de Metallica, que cerró la primera noche con un show impecable y con un set list que repasó prácticamente toda su carrera, siendo considerada como de las mejores presentaciones de la banda en Chile.

Metallica como ya es costumbre, se mostró muy cercana a sus fans, moviéndose por todo el escenario, y así poder lograr una mayor interacción con un fanático fiel, que en la mayoría de los casos, los ha visto más de una vez desde 1993 cuando fue su primera presentación en nuestro país, y que disfrutó hasta las lágrimas, con la fuerza que dan canciones como Master of Puppets, One o Sad but true, para finalizar con Nothing Else Matters y Enter Sandman donde aparecieron los fuegos artificiales que dan el toque final a una primera jornada de música.

Metallica, durante la primera jornada del Festival Lollapalooza Foto: Agencia Uno

El segundo día partió con los consagrados de We Are The Grand, más los chilenos de Gondwana, los cuales no presentaron nada nuevo llegando a ser lentos a ratos.

Por su parte, las gemelas canadienses de Tegan and Sara, son como la reversión de las rusas de T.A.T.U y cumplieron con sus fans presentando temas como Drove me Wild, Goodbye Goodbye y Nortshore.

En otro escenario se presentaban los norteamericanos de Jimmy Eat World, quienes, con su pop punk melódico, recuerdan a Franz Ferdinand, mientras, se comienza a hablar por la explanada del Parque O´Higgins de Melanie Martínez quien presentó su disco Cry Baby y quien se hiciera famosa luego de participar en el programa The Voice.

La sorpresa de la noche fue Two Door Cinema Club, quienes tocaron justo antes de The Strokes, con un contagioso y poderoso ritmo obligaba a los espectadores a moverse al son de la guitarra de Sam Halliday, consagrándose como una de las mejores bandas del género indie rock.

Pese a un incidente en el comienzo en el que las guitarras tapaban la voz de Casablanca, la banda norteamericana echó toda la carne en el asador y desataron la euforia con ‘New York City Cops’ y sobre todo con ‘Last Nite’, una de las canciones más coreadas del concierto.

Pero el concierto aún tenía una sorpresa final: Casablancas y sus chicos se soltaron la melena e interpretaron ‘You only live once’, sólo se vive una vez, esencia de la banda y una pieza que no tocaban últimamente, a la que siguió una magistral ‘Take it or leave it’ para cerrar un show que terminó muy bien pero pudo acabar muy mal.

Por su parte, uno de los shows más imponentes de la segunda jornada, estuvo en manos de los ingleses de Duran-Duran, quienes presentaron sus más grandes éxitos e inclusive hicieron un homenaje a David Bowie incluyendo partes de Space Oddity en su canción Planet Earth.

Y para finalizar dos grandes, en un escenario The Weekend, y en el otro, se esperaba el cierre de The Strokes, ahora unidos luego de su distanciamiento, quienes presentaron sus grandes éxitos, aunque no con la masividad que se asistió a Metallica, y con una gran fuga de espectadores al menos media hora antes de que cerraran el festival con The End de The Doors y los fuegos artificiales, quienes le dijeron adiós a dos intensas jornadas de música que reunió una variedad de estilos y que no podía dejar indiferente a ninguno de los fanáticos de la música.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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