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A los 80 años directora del Ballet de Santiago recibe el Oscar de la danza Fue en una ceremonia celebrada en el teatro Bolshoi de Moscú

A los 80 años directora del Ballet de Santiago recibe el Oscar de la danza

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La brasileña Marcia Haydeé recibió el premio a la trayectoria en los premios «Benois de la danse». El jurado internacional estuvo integrado entre otros por el argentino Julio Bocca, el mítico bailarín y actual director del Ballet Nacional de Uruguay (Sodres).


La brasileña Marcia Haydeé, que dirige el Ballet de Santiago de Chile desde 2004, con 80 años cumplidos, recibió este martes el premio a la trayectoria en los premios «Benois de la danse», considerados los Óscar de la danza.

La entrega del galardón se realizó en una ceremonia celebrada en el teatro Bolshoi de Moscú, la cuna del ballet.

«Todas las medallas que he recibido en mi vida, los premios y nominaciones, las he recogido con mucho respeto y cariño», había dicho anteriormente sobre este premio.

Haydeé, que dirige el Ballet de Santiago desde 2004, fue premiada por un jurado integrado entre otros por el argentino Julio Bocca, el mítico bailarín y actual director del Ballet Nacional de Uruguay (Sodres).

Los otros jurados, presididos por Yuri Grigorovich, fueron el coreógrafo Jorma Elo; los directores artísticos Seong Jin Kang (Ballet Nacional de Corea del Sur), Julie Kent (Ballet de Washington), Manuel Legris (Ballet Estatal de Viena) y Brigitte Lefevre (Festival de Danza de Cannes), además de Svetlana Zakharova, principal bailarina del Ballet del Bolshoi.

En la ocasión también fueron premiadas  la bailarina uruguaya María Riccetto y la argentina Ludmila Pagliero.

«Hay muchos talentos latinoamericanos, pero no hay plan a largo plazo. Hay que cambiar la mentalidad cultural, ya que la materia prima ya la tenemos. Debemos cambiar para seguir creciendo», señaló Bocca.

Trayectoria

La brasileña cumplió 80 años en abril del año pasado y fue confirmada recientemente en su cargo por Frédéric Chambert, director del Teatro Municipal, hasta el 2021. Antes ya había desempeñado el cargo entre 1993 y 1995.

«La danza es una disciplina que voy a practicar hasta el día en que me muera, hasta que Dios me lleve. Debuté en los escenarios a los seis años, y luego nunca más paré», comentó Haydée en una reciente entrevista con el diario El Mercurio. Por su calidad, a los 15 ya había sido aceptada en el Royal Ballet School de Londres.

Haydeé es considerada una de las más principales exponentes de la danza moderna y fue la musa del coreógrafo Maurice Béjart y el británico John Cranko en el Ballet de Stuttgart. Dirigió esa entidad entre 1976 y 1996, en los últimos años de forma simultánea con su par de Santiago. A lo largo de su carrera bailó junto a a destacados intérpretes como Rudolf Nuréyev, Mikhail Baryshnikov, Richard Cragun y Vladimir Malakhov.

Debido a su experiencia en Alemania, durante su gestión en Chile el Ballet de Santiago ha trabajado estrechamente junto a su par de Stuttgart. Incorporó varias obras de su repertorio y fomentó un intenso intercambio de artistas. El Ballet de Santiago se convirtió así en la compañía con más obras de John Cranko fuera del Ballet de Stuttgart.

Actualmente en Santiago se exhibe el clásico «El lago de los cisnes», con música de Piotr I. Tchaikovsky, hasta el 3 de junio próximo, donde Haydeé además hizo la coreografía.

«Trabajar con gente joven me da muchísima energía; me mantiene ágil. (…) Siento que lo mejor está aún por venir», declaró recientemente.

Creaciones y premios

Para su labor en Santiago creó especialmente las coreografías «Carmen», con música de la Ópera de Bizet, y «La Cenicienta», con vestuario y escenografía de Raymundo Larraín.

Entre sus premios cuentan el Honoris Cause de la Universidad de Stuttgart, además del Orden al Mérito Cultural de la presidencia de Brasil y su similar de la República Federal de Alemania.

«Hemos ido conquistando un numeroso público para la compañía, con varias fechas y el teatro absolutamente lleno», señaló en la citada entrevista. «Montajes como ‘Zorba, el griego’ o abrir las puertas al Ballet Nacional Chileno, sin duda, nos ha traído una audiencia nueva y entusiasta».

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