Publicidad

«Es una vergüenza social que tengamos estos niveles de pobreza y desigualdad»

El titular de Planificación aseguró que “por lo mismo se está realizando un fuerte gasto social y un importante crecimiento económico, que es la gran herramienta para destruir la pobreza». De acuerdo a la organización un 18,9% de los chilenos son pobres, una cifra sólo superada por México e Israel, y lejos del 10% en el conjunto de la entidad.


El ministro de Planificación, Felipe Kast, se refirió al informe «Panorama de la Sociedad» publicado hoy por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) el cual revela que Chile es el país –miembro- con mayores desigualdades entre su población en términos de ingresos, y el tercero en lo que se refiere a la proporción de pobres.

Al respecto el titular del Mideplan, calificó de «vergüenza social» los altos niveles de desigualdad. “s una vergüenza social que un país que crece tanto tenga estos niveles de pobreza y desigualdad, y por lo mismo estamos teniendo un gasto social muy fuerte, muy importante y no solamente eso sino que un crecimiento económico, que es la gran herramienta para destruir la pobreza», sostuvo el secretario de Estado.

«Sin empleo es muy difícil que podamos lograr el desafío de garantizarle a cada chileno un lugar en la sociedad de dignidad, un lugar sin pobreza», agregó.

En su informe, la OCDE destacó que el coeficiente de Gini que mide la desigualdad es en Chile de 0,50, cuando la media de la organización es de 0,31.

Además, un 18,9% de los chilenos son pobres, una cifra sólo superada por México (un tercio del total) e Israel, y lejos del 10% en el conjunto de la OCDE.

Los autores del informe relacionaron las fuertes desigualdades de la sociedad chilena con el hecho de que sólo un 13 % de sus miembros dicen tener confianza en sus conciudadanos, cuando la media en el conocido como el «Club de los países desarrollados» es del 59 %.

En todo caso, el 88 % de la población chilena con derecho a hacerlo vota, muy por encima del 70 % de media de la OCDE.

Chile arrastra todavía una mortalidad infantil relativamente alta en este grupo de países, en concreto la tercera más elevada tras Turquía y México con siete fallecimientos en el primer año por cada 1.000 nacidos vivos.

Sin embargo, el avance en la reducción de esa mortalidad infantil durante la última generación ha sido el tercero más fuerte, con 28 muertes evitadas por cada 1.000 nacidos vivos.

Por su parte, la esperanza de vida de los chilenos, con 78,8 años, se aproxima al promedio de la OCDE, que es de 79,3 años.

Publicidad

Tendencias