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Los planes de la bolsa alemana una vez que se concrete la fusión con la bolsa de Londres

Los planes de la bolsa alemana una vez que se concrete la fusión con la bolsa de Londres

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Las bolsas de valores son símbolos del capitalismo y el orgullo nacional, lo cual hace que tanto políticos como ciudadanos sospechen de los intentos de compra por parte de extranjeros. Pero en vez de convertir a LSE en un satélite alemán, hay signos de que Deutsche Boerse –cuya sede está en Fráncfort– se está volviendo más británica.


Para obtener una pista de la afinidad de Deutsche Boerse AG con el Reino Unido, un buen lugar para comenzar es el London City Airport a las 7:35 un día de semana cuando aterriza el primer vuelo de Lufthansa desde Fráncfort.

Es cuando un flujo de personal del operador bursátil alemán desembarca y aborda un tren hacia las oficinas de la compañía en Canary Wharf, según personas cercanas a la firma. Los empleados, muchos de los cuales trabajan para Eurex, el preciado negocio de operaciones con derivados de la firma, son parte de una compañía que se ha inclinado de manera creciente hacia Londres desde que Carsten Kengeter asumió como máximo responsable ejecutivo en junio.

Ese cambio se está acelerando, ya que Deutsche Boerse intenta combinarse con London Stock Exchange Group Plc, empresa que se inició en una cafetería londinense en 1698. Las bolsas de valores son símbolos del capitalismo y el orgullo nacional, lo cual hace que tanto políticos como ciudadanos sospechen de los intentos de compra por parte de extranjeros. Pero en vez de convertir a LSE en un satélite alemán, hay signos de que Deutsche Boerse –cuya sede está en Fráncfort– se está volviendo más británica.

A primera vista, los ciudadanos del Reino Unido parecerían tener razón al temer que su dominio sobre la London Stock Exchange disminuya. Aunque el acuerdo fue descripto como una fusión de iguales, los accionistas de Deutsche Boerse obtendrían una tajada mayor de 54,4 por ciento de la compañía combinada, según los términos que se están negociando. El máximo responsable de LSE, Xavier Rolet, se apartaría si las empresas se fusionan, dando lugar a que Kengeter conduzca la firma agrandada.

Centro clave

Sin embargo, Deutsche Boerse está reforzando sus lazos con Londres, lo que subraya el estatus de la ciudad como centro financiero clave de la región. Recientemente tomó en alquiler otro piso en sus oficinas de Canary Wharf.

Tiene sentido que un máximo responsable proveniente de Goldman Sachs Group Inc. y centrado al milímetro en sus clientes de banca pase más tiempo en Londres. Más de 250 bancos extranjeros están enfocados en la capital británica, más que en cualquier otra ciudad del mundo.

“Por cierto, Carsten forjaría relaciones más estrechas con los bancos, algo en lo que LSE ha tenido mucho éxito”, dijo Remco Lenterman, que durante un tiempo negoció acciones con Rolet en Goldman Sachs en Londres. Lenterman fue más recientemente director general del operador IMC Financial Markets. “Queda claro que la entidad combinada tendría relaciones más estrechas con la City que las cultivadas hasta ahora por Deutsche Boerse”.

Para LSE, la parte londinense de su nombre ya ha sido diluida. Su mayor accionista es la Qatar Investment Authority, y el dinero que obtiene de Estados Unidos rivaliza con sus ingresos británicos. El negocio bursátil posee un mercado de valores con sede en Milán y una compañía tecnológica en Sri Lanka.

Conforme la empresa alemana expande su alcance, los documentos referidos a la fusión sugieren que mantendría su sede en Fráncfort. El negocio fusionado seguiría teniendo una sede en la capital financiera alemana. Los negocios claves mantendrían sus denominaciones comerciales. Frankfurt Main Finance, que representa a la comunidad financiera de Fráncfort, elogió el posible acuerdo y dijo que es importante para Europa tener “su propia estructura financiera fuerte”.

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