Publicidad

País bilingüe, ¿pasaporte al desarrollo?

Publicidad


Hace unas semanas fui invitado al cóctel que, en honor del nuevo representante del Reino Unido en el Perú, el embajador Anwar Choudhury, organizó la Cámara de Comercio Peruano Británica, en Lima.

En la ocasión, el embajador mencionó la firme disposición del Reino Unido de colaborar con voluntad y firmeza a la innegable y enorme tarea de convertir al Perú en una nación bilingüe en inglés para el 2021, año de su bicentenario.

Se le preguntó al embajador si consideraba el desafío factible en los poco más de siete años que quedan para la fecha en cuestión. Su respuesta me sorprendió. Señaló que, al ser el idioma inglés más que una mera lengua, un pasaporte y entrada al desarrollo, Gran Bretaña se esforzará genuinamente por apoyar al Gobierno del Perú en esta tarea, y de esta manera entregar a los escolares peruanos oportunidades reales para sus vidas.

Las declaraciones, el ánimo y todo el contexto me hizo reflexionar en relación al tema del dominio del idioma inglés a nivel escolar en Chile: ¿Es realmente una meta nacional que se está persiguiendo genuinamente en el país?; Los programas a nivel escolar iniciados en el pasado en esta dirección, ¿Se han robustecido, mejorado o al menos mantenido?; ¿Existe alguna meta nacional definida, disponible para ser publicada o anunciada a la ciudadanía, para gatillar la creación de círculos virtuosos en esa dirección?

Como Asociación Chilena de Empresas de Tecnologías de Información, ACTI, tenemos la misión de construir sistemas y soluciones inteligentes a partir del conocimiento y de las mejores prácticas. Si tomamos en cuenta que solamente en internet, el 56% del total del contenido es en inglés y solo el 5% es en español, estamos frente a una brecha entre nuestros profesionales que dominan el inglés y quiénes no. Este ratio aumenta cuando nos concentramos en papers y publicaciones en la frontera del conocimiento.

Resulta necesario un acuerdo de alta política, con un liderazgo definido, en donde el sector público, privado y universidades definan un curso de acción claro, con metas y objetivos medibles. ¿Queremos Smart Cities, ahora?, pues al menos que los escolares sepan qué significa “Smart” y desde allí construyamos.

Desde ACTI nos ponemos a disposición de una tarea país como ésta, como siempre lo hemos hecho en los 30 años de existencia, a través de nuestro quehacer utilizando la tecnología, innovación e infraestructura digital.

Gilbert E. Leiva
Director ACTI
Encargado Grupo Educación

Publicidad

Tendencias