En Icare, Enrique Correa la lleva
Fue uno de los seminarios de Icare más esperados.
Enrique Correa, uno de los pesos pesados de la Concertación, debatiendo con el presidente del Instituto Libertad y Desarrollo, Luis Larraín, acerca de lo que se viene el 2013.
Los pesos pesados del empresariado estaban presentes. La entrada del menú era el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, y lo que tenía que decir sobre la economía.
El plato de fondo era el mano a mano entre Correa, ex ministro del gobierno de Patricio Alwyn, asesor estratégico de algunos de los hombres más poderosos de Chile y hombre muy cercano a Michelle Bachelet.
El empresariado en pleno quería escuchar lo que tenía que decir. Y no defraudó. Dio casi por hecho que Bachelet volverá a ser presidente, pero les dio calma y aseguró que reinará el respeto por la institucionalidad y les garantizó que los movimientos sociales no han reemplazado a la política.
El postre para ellos fue que Correa, hombre que luchó contra el régimen militar, reconoció que el boom económico de los últimos 25 años lo empezó Hernán Büchi, economista, ministro y hombre emblemático del gobierno del general Augusto Pinochet.
Lo que dijo fue suficiente para que una vez terminada su presentación el empresariado en masa abandonara la sala y dejara al titular de Libertad y Desarrollo hablando ante un público muy reducido, por no decir escueto.
Al menos por un día, el empresariado prefirió escuchar a un "enemigo" en vez que a uno de los suyos.
Parece que seguían el consejo de Nicolas Machiavello, que aconsejaba a los poderosos a "tener cerca a tus amigos pero más aún a tus enemigos".