Señor Director:
Emergencia ambiental por nube tóxica en Quintero”, es una premisa constante de los últimos meses, la realidad es que el nivel de contaminación es preocupante, el número de enfermos en Quintero no para de aumentar y la cantidad de estudiantes afectados es impresionante. Mi incertidumbre por el tema comenzó hace poco, pero este conflicto lleva años sin resolverse, la verdad es que nadie se quiere hacer cargo de este problema ambiental, ni siquiera las principales empresas claramente culpables (Oxiquim y Enap).
Más de 150 alumnos enfermos en el último tiempo, náuseas, mareos y vómitos son los principales síntomas. Según Laura Börgel (Toxicóloga de la empresa de asesorías en evaluación de riesgos) en el aire circula Isobutano, Nitrobenceno y Cloroformo de metilo (familia de los Hidrocarburos con principales síntomas de narcóticos y altamente dañinos). Con estos antecedentes, ¿cómo se pueden vulnerar tanto los derechos humanos sin que nadie responda a ellos? Múltiples colegios han tenido que cerrar sus puertas por la problemática, vulnerando el Artículo n°26 de la declaración universal de derechos humanos. No puede ser que todavía haya gente que cree que exageramos, el ecosistema ya no es igual que antes, y aún así dejamos que empresas dañen nuestro aire. No hay que perder la fe de que puede existir aún la solución a este conflicto.
Por último, considero que el presidente Piñera reciba un premio medioambiental por su “contribución ejemplar” contra el cambio climático es insólito, ya que nuestro país esta pasando por una crisis y debemos hacer algo al respecto.
Francisca Reguera
