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Un acto de justicia pendiente Opinión

Un acto de justicia pendiente

Juan Yuz Eissmann
Por : Juan Yuz Eissmann Rector Universidad Técnica Federico Santa María
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Una estudiante de enseñanza media en Chile, con buenos resultados en ciencias, matemáticas y lenguaje está pensando en la carrera que elegirá para continuar sus estudios superiores, ¿qué tan probable es que se incline por un programa científico-tecnológico?

Según el último informe sobre brechas de género del Servicio de Información de Educación Superior (SIES), de los 90.580 estudiantes que en 2022 ingresaron a carreras STEM (siglas en inglés para denominar las disciplinas de ciencia, tecnología, ingeniería y ciencias), solo un 19% son mujeres, casi el mismo porcentaje (19,9%) de las profesionales de ciencia e ingeniería que hoy existen en todo el mundo.

La brecha es evidente y en gran medida se explica por factores culturales relacionados a los estereotipos y sesgos de género, así como la falta de reconocimiento y visibilización de mujeres referentes. Aunque en ocasiones nos cueste más identificarlo, puede también deberse a los sesgos incrustados en planes de estudio, libros guía y prácticas de enseñanza y aprendizaje que usamos día a día. En este contexto vale preguntarse, desde las instituciones universitarias, ¿cuántas estudiantes han pensado en tomar este camino y finalmente han declinado?, ¿de cuántas ingenieras y científicas de excelencia nos hemos perdido? o ¿podemos hoy en día, como sociedad, darnos el lujo de perder ese talento?

La diversidad de género en equipos de trabajo genera ciencia de mayor impacto, además, aporta a la innovación enriqueciendo la discusión con diversos puntos de vista y estrategias. Involucrar activamente a niñas y adolescentes en el desarrollo de la ciencia y la tecnología es una responsabilidad ineludible con el desarrollo del país y, más aún, un acto de justicia largamente pendiente.

En consecuencia, debemos comprometernos y generar acciones concretas y transmitir mensajes claros. Es por lo que esta semana, en el marco de la Ceremonia de Inauguración del Año Académico 2023, homenajeamos a Graciela Muñoz Marazzi, nuestra primera mujer titulada de Ingeniería el año 1964, y entregamos por primera vez el premio que lleva su nombre a mujeres destacadas de nuestra comunidad universitaria.

Como institución nos hemos puesto como objetivo reforzar nuestros cuadros académicos y docentes, con especial foco en reducir brechas de género. De la misma forma, reforzaremos nuestros mecanismos de admisión para mujeres líderes y seguiremos impulsando actividades e iniciativas a través de nuestra Unidad de Equidad de Género e Inclusión y del proyecto InES de Género.

Como universidad líder en ingeniería, ciencia y tecnología no solo tenemos la obligación de avanzar en esta materia, sino también de empujar el cambio cultural dentro y fuera de los límites de nuestra institución. Es parte de nuestro rol y responsabilidad con toda la sociedad.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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