Los estudiantes rechazaron este fin de semana la propuesta del ministro de Educación, Joaquín Lavín, señalando que “no se trata hoy día de soltar un paro para volver a clases y que todo sea normal”. Por su parte, la autoridad anunció la recalendarización del año escolar en 200 colegios de la capital, al tiempo que calificó de “ideologizado” al movimiento estudiantil.
El fin de semana largo no significó descanso para los dirigentes estudiantiles, que mantienen numerosas universidades y colegios tomados. Junto al Colegio de Profesores oficializaron el rechazo a la propuesta ofertada por el ministro de Educación, Joaquín Lavín, y llamaron a un paro nacional para el próximo jueves 30 de junio.
Tras esto, el secretario de Estado anunció que el gobierno extenderá las clases para aquellos colegios que se mantienen en paros y tomas. «He citado a todos los directores provinciales de Educación de la Región Metropolitana, para modificar el calendario escolar en 200 de los 3.050 colegios», sostuvo la autoridad.
Al respecto, Giorgio Jackson, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (FEUC) y uno de los voceros de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) aseguró que la medida anunciada por Lavín corresponde a una “estrategia para dividir” el movimiento estudiantil.
“De todas maneras hay algunas estrategias que se han visto como para romper o dividir el movimiento estudiantil, pero hoy día estamos en instancias de coordinación con los estudiantes secundarios a nivel nacional y también obviamente con los estudiantes de universidades privadas”, sostuvo el dirigente en Radio Cooperativa.
Agregando que “hay distintas realidades, a los estudiantes secundarios se les prolongaría su año académico, pero independiente de eso hoy día estamos movilizados sin considerar, sin estar pendientes de los costos que significa esto”.
“Los estudiantes hoy día conocen los costos que implica esto, pero aún así están dispuestos a correrlos porque este es un tema central, que se viene arrastrando hace muchos años, entonces no se trata hoy día de soltar un paro para volver a clases y que todo sea normal”, concluyó.
En entrevista con Radio Agricultura, el ministro Lavín, respondió que “aquí se cruzó el umbral, se fue mucho más allá y de un movimiento genuinamente educacional se pasó a uno mucho más ideologizado”.
El titular del Mineduc indicó que “siento que lo que era una preocupación educacional de verdad, ha derivado en temas muchos más ideologizado y no muestran una voluntad de querer sentarse a una mesa para arreglar los temas de la Educación”.
En ese sentido, afirmó que “lamentablemente este fin de semana se nos ha dado verdaderamente un portazo a la posibilidad de diálogo en Educación. Como Gobierno y Ministerio tenemos que seguir adelante con nuestra agenda, definir los cursos de acción y llevar los proyectos al Congreso”.
