Aunque el círculo de hierro de Andrés Allamand intenta obstaculizar el paso al titular de Obras Públicas, los hechos son los que parecen estar imponiéndose. Los comicios de octubre están resultando ser el mejor argumento para convencer a los candidatos del partido de Carlos Larraín de arrimarse al árbol más seguro. Las encuestas lo dan como favorito y los aspirantes a alcaldes o concejales de la tienda no quieren correr riesgos. Muchos de ellos tienen la convicción de que su buena estrella les podría asegurar el triunfo.
El entredicho comunicacional entre dos de los ministros presidenciables, Andrés Allamand y Laurence Golborne, ha contribuido a fortalecer la idea de que el primero no tiene una estrategia clara para enfrentar a sus eventuales adversarios al interior del oficialismo y que “está nervioso”, porque el titular de Obras Públicas parece tener todas las de ganar.
Por lo que la tan vapuleada figura del senador Alberto Espina, primero en advertir al interior de Renovación Nacional de esta ventaja evidente, parece estar encontrando adherentes. Una de ellas, la diputada Karla Rubilar, quien junto a su marido, el alcalde de Conchalí Rubén Malvoa, ya han expresado públicamente su respaldo a la candidatura del ex ejecutivo de Cencosud. Golborne, por su parte, avanza lento, pero cada vez más seguro, en captar adherentes de la casona de Antonio Varas. Y los comicios municipales le están abriendo su gran oportunidad. Paralelamente, la negativa del titular de Defensa a involucrarse activamente en ese proceso y la situación del accidente aéreo de Juan Fernández —que parece estar complicándose— facilitan el escenario para su contrincante.
A sólo meses de las elecciones municipales de octubre, están los que estiman que el escenario de RN es complejo, dada la postura asumida por Allamand, quien ha señalado que no participará activamente en los comicios. Esto, explica un observador del partido, genera un escenario complejo no sólo para él, sino también para los dirigentes empecinados en apoyar su candidatura, “a pesar que las duras cifras demuestran que el candidato presidencial que más certezas da para mantener el gobierno es Golborne”. El problema, dicen quienes analizan el escenario en el partido, es que lo fomente o no el titular de Obras Públicas, ya que “es altamente probable que muchos de nuestros candidatos al municipio opten por salir en la foto con él, porque creen que eso les asegura la elección”.
La aparente tranquilidad de Allamand se rompió, cuando el propio ministro decidió hacer una explosiva aparición en los medios. Fue él mismo quien infringió su ideario de abocarse sólo a su labor como titular de Defensa, dicen sus críticos en RN. Y, por añadidura, provocó la primera refriega importante al interior del gabinete por el tema presidencial. Algo que no pasó inadvertido para los que aún no tienen tan claro, en el partido, que el secretario de Estado sea quien mejor interprete el anhelo de continuidad de la tienda, tras la salida de Sebastián Piñera de La Moneda. Aunque ya era conocida su postura de que la experiencia política será importante para definir al abanderado del sector, lo que llamó la atención fue la alusión que hizo respecto del perfil empresarial de su par de Obras Públicas.
[cita]Golborne no ha perdido el tiempo intentando generar lazos en Renovación Nacional. Su cercanía con la UDI es conocida, pero no ocurre lo mismo con la tienda de Carlos Larraín. Sin embargo, pese a no tener el ADN de Renovación, como Allamand, se le da más fácil lo social y no escatima esfuerzos en tratar de agradar a este sector de la Alianza. La reunión con profesionales que se desempeñan en el Gobierno, organizada por el RN Gonzalo Díaz del Río es sólo una muestra de que en la tienda, está comenzando a tomar cuerpo la pragmática postura promovida por Espina.[/cita]
“No estoy diciendo con esto una crítica a la trayectoria empresarial que puede haber tenido Golborne”, señaló, en un contexto que algunos estiman innecesario. Porque, entre otras cosas, se arriesgó a la respuesta que le llegó de vuelta de parte del aludido, quien atribuyó las palabras de Allamand a que “tal vez falta ahí más oficio político”. Para un representante de RN, el titular de Defensa desató “un conflicto innecesario”, ya que dirigentes del partido se sintieron obligados a salir a defenderlo, “cuando en realidad el ofendido, sin motivo alguno, fue Golborne. Porque Allamand aludió a un tema que es sensible, si se considera que a Piñera se le ha sacado en cara permanentemente su calidad de empresario, desde que era candidato”.
Así, tras la reacción de Golborne, el secretario general de RN, Mario Desbordes salió a blindar a Allamand. “Sorprenden la dureza y el tono de las declaraciones del ministro, considerando que Andrés fue bastante prudente y siempre hizo un llamado a la unidad. Vamos a apoyar a nuestro candidato, destacando sus virtudes y eso no puede ofender a nadie”, advirtió. Postura que a ojos de quienes se sienten más inclinados a respaldar la figura del titular de Obras Públicas, “era innecesaria. Para qué ponerse mal con Golborne si podría ocurrir que terminara siendo el candidato de la Alianza”, plantea un observador del partido.
Otro representante de Renovación, hace ver la “bipolaridad” en que se están moviendo los dirigentes de su partido. Ello, quedaría demostrado, a su juicio, con el tono tan distinto que tienen las declaraciones del mismo Desbordes, dos días después. A diferencia de la primera vez, el dirigente planteó en Radio Cooperativa “el que nosotros tengamos un nombre, que nos parece natural, el más obvio, que es Andrés Allamand —que es el que nosotros queremos por un tema de historia, de trayectoria— no tiene por qué significar un ataque a otro candidato ni tampoco tiene que significar que queramos una definición hoy día”. Y llamó a cuidar a todos los candidatos del oficialismo, advirtiendo que “es nuestra responsabilidad que este proceso de definición del candidato no signifique heridas, no signifique daños ni signifique —en buen chileno— rayarle la pintura a ninguno de los nombres que hoy día están con posibilidades de representar a la coalición” en las próximas presidenciales.
Esta variación en el tono del secretario general provocó, en algunos, la sensación de que los máximos dirigentes de RN “no están tan seguros de dar el paso definitivo” de “amarrarse con la candidatura de Allamand”. Y en estas circunstancias, aumentan los que se preocupan por el resultado de las municipales. En un escenario tan difícil como el actual para la Alianza, no son pocos los que sienten la necesidad de aferrarse a una carta que les asegure el triunfo. Este es un tema que preocupa particularmente a los que van a la reelección. De allí que haya quienes estén pensando en sumar, junto a Espina, al grupo que aspira a que RN entregue su respaldo al titular de Obras Públicas lo antes posible. A este análisis ha contribuido también el hecho de que hay quienes sienten que “el tema del accidente de Juan Fernández se está complicando” y que lo que parecía de fácil y rápida solución podría terminar convirtiéndose en una gran problema. Y así como ayudó al titular de Defensa a subir en las encuestas, rápidamente podría pasar a ser un lastre insalvable.
Mientras tanto, Golborne no ha perdido el tiempo intentando generar lazos en Renovación Nacional. Su cercanía con la UDI es conocida, pero no ocurre lo mismo con la tienda de Carlos Larraín. Sin embargo, pese a no tener el ADN de Renovación, como Allamand, se le da más fácil lo social y no escatima esfuerzos en tratar de agradar a este sector de la Alianza. La reunión con profesionales que se desempeñan en el Gobierno, organizada por el RN Gonzalo Díaz del Río es sólo una muestra de que en la tienda, está comenzando a tomar cuerpo la pragmática postura promovida por Espina.
Una señal nada menor en materia municipal, la dio el alcalde de Conchalí, Rubén Malvoa, quien no ha ocultado su simpatía por la candidatura del ministro de Obras Públicas. De hecho, aunque el secretario de Estado no pudo asistir a la cuenta pública de Malvoa, grabó un saludo que fue recibido con intensas muestras de apoyo por parte de los presentes en la actividad. Y para el 4 de mayo está contemplada la visita del ministro a la comuna para iniciar los trabajos de un colector, oportunidad en la que —según trascendió— se le realizará un “gesto” en relación a su candidatura presidencial.
Este tipo de manifestaciones está generando inquietud al interior del partido. Sobre todo, porque de parte de quienes apoyan a Allamand estiman que, pese a los llamados del Presidente, la carrera presidencial está desatada al interior de la Alianza y el titular de Defensa se está quedando atrás.
