Publicidad
Usar racionalmente el agua y evitar envases desechables: qué cambiarían las y los chilenos en la cocina para enfrentar al cambio climático Sustentabilidad

Usar racionalmente el agua y evitar envases desechables: qué cambiarían las y los chilenos en la cocina para enfrentar al cambio climático

Publicidad

Un 62% de los encuestados declara que estaría dispuesto a evitar los plásticos de un solo uso, un 57 % a mejorar el uso del agua a la hora de cocinar y un 39% estaría dispuesto reducir su consumo de carne.


Las y los chilenos están cada vez más conscientes del impacto que tienen sus hábitos en la lucha contra el cambio climático y sus prácticas en la cocina y a la hora de alimentarse no son la excepción.

El estudio Radiografía de la Alimentación realizado por Aramark-Cadem, lo confirmó: un 62% estaría dispuesto a dejar de usar envases desechables, un 57% usaría más racionalmente el agua al cocinar, mientras que un 46% estaría dispuesto a reciclar inorgánicos y un 40% a hacer compostaje con los residuos orgánicos.

¿La razón? Contribuir a mitigar el cambio climático y cuidar el planeta. Estos son algunos de los hallazgos de esta investigación realizada por segundo año por la empresa de servicios de alimentación  y que en 2022 indagó por primera vez en esta arista.

“Sabemos que la alimentación no se trata solo de preferencias personales, sino que está empezando a incluir una mirada colectiva, por sus efectos en el planeta. Por eso quisimos indagar en la disposición del país respecto de este tema”, señaló Ari Bermann, vicepresidente de Crecimiento, Sostenibilidad y Desarrollo de Negocios de la empresa.

Cambios en los hábitos de alimentación

Paralelamente, esta segunda versión, el estudio reveló que un 39% de los encuestados señaló que estaría dispuesto a reducir su consumo de carne para mitigar los efectos del calentamiento global, y un 16% consideraría dejar de comerla.

Esta disposición se condice con la evidencia científica actual: la revista Nature publicó recientemente que un tercio de todas las emisiones de gases invernadero producidos por el hombre tienen relación con la alimentación, siendo la actividad ganadera una de las con mayor impacto.

Entre otros resultados del Estudio destaca que un 65% de los entrevistados declara seguir actualmente algún estilo de alimentación. Entre estos destacan el no consumir azúcar refinada (31%), no consumir lactosa (25%), llevar una dieta alta en proteínas (24%) y no consumir carnes rojas (22%). En tanto, un 6% declara ser vegetariano.

El estudio mostró que la principal motivación para adoptar algún estilo de alimentación específico se vincula a la salud – “para cuidar la salud en general” (44%) y “para cuidar el peso” (17%).

“Es muy importante que las personas que realicen cambios sustanciales o repentinos ensus hábitos alimenticios se informen a través de fuentes confiables o profesionales especialistas y no dejarse guiar por modas”, explicó Evelyn Figueroa, nutricionista y coordinadora de programas de vida saludable de la compañía.

“La actual crisis climática debiera empujar cada vez más el criterio medioambiental como parte de estas decisiones de alimentación. Cuidar la salud y tomar opciones alimenticias más responsables con el planeta son ámbitos absolutamente compatibles”, enfatizó

El estudio también indagó en qué medida se incorporan criterios medioambientales a la hora de comprar alimentos.

Si bien los más preponderantes siguen relacionados al precio y calidad de los alimentos, al menos un 41% de los consultados declaró considerar “mucho o bastante” que sus alimentos “sean producidos de manera sostenible, que respeten el medioambiente.

Publicidad

Tendencias