«La música hace saltar las fronteras y muchos temas chilenos los llevamos en nuestros corazones, nos han acompañado en los momentos duros y en los momentos buenos», dice la intérprete argentina, que incluyó un tema de Patricio Manns en su nuevo disco y hoy compartirá escenario con algunos créditos nacionales.
Fue una quinceañera que cantaba en los bancos del colegio canciones de Palito Ortega y que más temprano que tarde alcanzó fama y fortuna, deslumbrando con zambas, chacareras, litoraleñas, valses, rasguidos dobles y candombe.
En la gira que la trajo al país para dar, actuará a las 20.30 en el Teatro Oriente, un segundo aire al ciclo «Latinas en Vivo», presentará su última producción discográfica, Soledad, que incluye canciones de Roberto Márquez, Los Angeles Negros y Douglas.
«Hay una conexión muy especial entre la música de los países de Latinoamérica» -afirma la cantante argentina al referirse a su último trabajo, donde grabó también una pieza de Patricio Manns, «Si queremos»-,y agrega: «La música hace saltar las fronteras y muchos de los temas chilenos que llevamos en nuestros corazones nos han acompañado en los momentos duros y en los buenos».
Folklore y mercado
Desde la segunda mitad de los años noventa Soledad se instaló, para quedarse, entre las voces destellantes de las nuevas generaciones. En el trayecto que inició con la grabación del disco Poncho al Viento, rápidamente alcanzó el platino, lo que le permitió la entrada a escenarios mayores.
Pronto concretó una segunda producción La Sole, donde aporta con una versión de un tema de César Isella. Dentro de las actuaciones de ese trabajo presentó a su hermana Natalia, interpretando Sapo Cancionero con un acompañamiento de guitarras. El tercer cedé fue A mi gente.
Dice que «cumplió 18 a los 20». Ahora, tiene 21 años de edad y dedica el talento a cultivar la raíz latinoamericana, pero sin alejarse de la categoría de fenómeno en el mercado que sumó a su cuarto disco, Yo sí quiero a mi país decenas de actuaciones en vivo y millones de ejemplares vendidos.
"Esto se debe a la apertura mundial a la música latina", comenta escueta.
Es la heredera adolescente del repertorio popular, que decidió hacer carrera en las aguas de las tradiciones.
"Elegí el folklore porque es la música que siento como propia, pero podría haber sido otro estilo musical», precisa.
El concierto
En una fugaz conversación, Soledad adelanta que para el reencuentro con Santiago traerá un espectáculo renovado y sencillo, con nada más que cinco músicos: dos guitarras, percusión, bajo, teclado.
«Queremos transmitir la fuerza y sentimiento de un trabajo más localista, más tranquilo, con repertorio nuevo de autores y por supuesto que también habrá canciones conocidas en Chile", comentó.
Luego de la actuación en Chile, Soledad continuará el periplo que viene realizando desde Miami, México y Ecuador, para seguir a Bolivia y Venezuela.
«Esta es la puerta que se ha abierto con Yo sí quiero a mi país. Estoy muy contenta con lo que ya logré, conseguí el aplauso de Chile y de mi país y ante todo quiero cumplir con las expectativas de mi público», afirma la artista a pocas horas de su actuación en Santiago.
