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Polémica Casen: un tema esencialmente económico amenaza con convertirse en la peor crisis política de Piñera

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El tema parecía estar apagándose hasta que Ciper lo hizo estallar el viernes con un reportaje en el que sugiere que el Gobierno presionó a la Cepal para corregir un primer informe que arrojaba un 15 por ciento de pobreza.

De acuerdo al reportaje de Ciper, la Cepal había accedido a la petición del Ministerio de Desarrollo Social de incluir una pregunta sobre la variable de ingresos de familiares no remunerados, desocupados e inactivos que no figuró en la encuesta del 2009, mientras el trabajo en terreno de la nueva se realizó en noviembre de 2011, después que el Gobierno entregara un bono en efectivo a las familias de menores ingresos.

Según los críticos, la inclusión de esa pregunta determinó la reducción de la pobreza al 14,4 % en la nueva encuesta.

El reportaje hizo que la polémica, que hasta ese momento era esencialmente entre economistas, explotara y se transformara en una crisis política que amenaza con ser la más compleja que ha enfrentado La Moneda desde que Sebastián Piñera asumió la Presidencia.

«Hasta que salió lo de Ciper, la polémica era técnica y con ribetes políticos limitados. Ahora es una crisis de proporciones y no le veo una salida fácil para el Gobierno», comenta un economista que trabajó en los gobiernos de la Concertación, pero que no está activamente ligado a partido alguno.

Al reportaje de Ciper le siguió el anuncio de la renuncia de dos economistas ligados a la encuesta: Andrés Hernando, jefe de Estudios del Ministerio de Desarrollo Social, y Juan Carlos Feres, jefe de la Unidad de Estadísticas Sociales de la Cepal y encargado de trabajar con el MDS en la elaboración de la encuesta Casen.

Los dos economistas declaran que no hay bases, desde el punto de visto técnico, para afirmar que categóricamente hubo una disminución de la pobreza.

Feres afirmó en una aparición en CNN-Chile, que la “Cepal no ha actuado con la oportunidad que corresponde, de manera de suministrar a la opinión pública la información técnica que la Cepal ha preparado en el proceso de elaboración de las estimaciones de pobreza de la encuesta Casen”.

Una fuente cercana a la polémica relata que Feres tuvo un fuerte desacuerdo con la forma en que su jefa, la mexicana Alicia Bárcena, respondió a las presiones de La Moneda.

Por su parte, Hernando cuestionó la forma rimbombante con que el Gobierno, en su opinión, dio a conocer los resultados.

Hernando legitimó técnicamente la encuesta y argumentó que los cambios introducidos no eran significativos. Mientras la oposición ha sostenido lo contrario y el Gobierno ha respondido subrayando la validez de los resultados, porque fueron avalados por la Cepal.

El domingo, la Cepal misma salió a defenderse, y en un comunicado poco claro anunció que revisará «la continuidad» de su colaboración con Chile en la encuesta, tras ser involucrada en un debate sobre una supuesta manipulación de las cifras en el último sondeo.

En un comunicado de prensa, el organismo de Naciones Unidas precisó que por esa causa decidió evaluar la ayuda que presta en la elaboración de la encuesta .

«La Cepal lamenta el uso que se ha hecho de su prestigio institucional durante los debates que se han suscitado a partir de la divulgación de las cifras de pobreza por parte del MDS y revisará la continuidad de esta colaboración», destaca el comunicado.

La Cepal recordó que es responsabilidad del ministerio respectivo «definir los alcances temáticos de la encuesta» y que también «es responsable de difundir los resultados».

Explicó además que utiliza la misma metodología en toda América Latina, aclarando que «no necesariamente comparte la línea de pobreza de muchos países de la región» y que desde el 2009 «ocurre lo mismo en Chile».

Anoche, en el programa Tolerancia Cero, el ministro Secretario General de la Presidencia, Cristián Larroulet, defendió la encuesta. «Acá todos los cuestionamientos técnicos están equivocados. No hubo ninguna comparación equivocada ni intento de distorsión», repondió sobre las objeciones de la oposición a este respecto.

Agregó que «lo que hay detrás es negar los resultados de un Gobierno de centroderecha que ha logrado disminuir la pobreza, que ha logrado disminuir la extrema pobreza».

La polémica aterrizará esta semana en la Cámara de Diputados.

El presidente de la Comisión de Superación de la Pobreza de la Cámara de Diputados, Fuad Chahín (DC), anunció que citarán al ministro de Lavín por posible manipulación. Chahín adelantó que también invitarán a exponer a especialistas en economía y a funcionarios de la Cepal.

El viernes, el ministro Lavín fue a La Moneda, donde se reunió con el Presidente Sebastián Piñera. Al salir expresó que «no he engañado a nadie».

El propio mandatario afirmó a los periodistas que «tanto las cifras que dio a conocer el Ministerio de Desarrollo Social, como las que dio a conocer Cepal, muestran que la pobreza en Chile está disminuyendo».

Entre las críticas que se le hacen al Gobierno está el no clarificar cuáles eran los márgenes de error de la muestra y «cantar victoria».

En las últimas tres semanas, el ex ministro de Hacienda Andrés Velasco y el economista de la Universidad de Chile, Dante Contreras, han estado liderando las críticas a la metodología y falta de información de cómo se compilaron los datos.

La más grave de las críticas la expresan en una columna de opinión titulada «Malas Prácticas y la Casen» publicada el 13 agosto pasado en el diario La Tercera. En ella apuntan a posibles maniobras irregulares en su elaboración, las cuales de ser ciertas, a juicio de Velasco y Contreras, ponen en juego la reputación del país, el que ya es respetado por tener «un trato riguroso de las estadísticas económicas y sociales».

El senador Ricardo Lagos Weber (PPD), en tanto, aseguró que «se le ha hecho un tremendo daño a la imagen de Chile. Que un organismo de Naciones Unidas (Cepal) diga que va a evaluar seguir colaborando con el Gobierno de Chile, yo no recuerdo que haya pasado algo así desde la dictadura».

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