El Régimen de Transición, aprobado con el soporte de una mayoría oficialista, incluye, además, la reestructuración de las cortes de justicia y electoral.
La Asamblea Constituyente de Ecuador aprobó hoy la creación de una «Comisión Legislativa» que hará las veces de Parlamento en el marco de un Régimen de Transición, para suplir el vacío de ese poder mientras se aprueba la nueva Carta Magna.
Esa resolución entrará en vigor solo si la nueva Constitución es aprobada por el pueblo en un referendo que se celebrará el próximo 28 de septiembre.
El proyecto de Carta Magna ha sido elaborado por la Constituyente en los últimos ochos meses en la localidad de Montecristi, de la provincia costera de Manabí, en el oeste de Ecuador.
Según el Régimen de Transición, la Asamblea Constituyente, que entrará en receso legislativo desde el próximo sábado, se reunirá cinco días después de proclamados los resultados del referendo para conformar la Comisión Legislativa, de ser el caso.
Esa comisión cumplirá las funciones de la «Asamblea Nacional», como denomina el nuevo proyecto constitucional al Congreso, hasta que se designen en elecciones generales a los nuevos integrantes de la función legislativa.
Además, el Régimen de Transición advierte de que el actual Tribunal Supremo Electoral (TSE) se denominará Consejo Nacional Electoral (CNE) y que se creará un Tribunal Contencioso Electoral.
El Consejo Nacional Electoral se encargará de la parte organizativa y operativa de dicha función, mientras que el Tribunal Contencioso será el órgano que administre justicia electoral, señaló la resolución aprobada esta noche por la Constituyente.
El CNE, según la propuesta transitoria, organizará las próximas elecciones generales, que podrían llevarse a cabo a finales de este año o inicios del próximo, con el nuevo marco institucional, si gana el Sí a la nueva Carta Magna en el referendo.
En esos comicios se elegirán al Presidente y Vicepresidente de la República, cinco parlamentarios andinos, los nuevos integrantes de la función legislativa, prefectos provinciales, alcaldes municipales y vocales de las juntas parroquiales rurales.
Con el fin de agilizar ese proceso electoral dispuesto en el Régimen de Transición, la Asamblea elegirá, de manera transitoria, a los integrantes del Consejo Nacional Electoral y del Tribunal Contencioso Electoral, cuyos titulares serán designados, de ser el caso, con el nuevo marco constitucional.
El Régimen Transitorio también dispone la reestructuración de la Corte Suprema de Justicia, la cual cambiará de nombre a Corte Nacional de Justicia y reducirá el número de magistrados de 31, que actualmente la integran, a 21 jueces.
El mecanismo de transición establece que diez días después de proclamados los resultados del referendo se efectuaría la reestructuración de la Corte Suprema.
Así, el Consejo Nacional Electoral organizaría un sorteo para definir a los 21 jueces, de entre los 31 magistrados actuales, y a los cuales se les encargará las funciones de esa institución hasta que se designen a los titulares mediante el nuevo marco institucional que propone el proyecto de nueva Carta Magna.
Una vez que se promulgue una ley que regulará el funcionamiento del Consejo Nacional de la Judicatura, este organismo conformará la futura Corte Nacional de Justicia, así como las cortes provinciales y distritales del país.
Otra de las disposiciones del Régimen de Transición es el establecimiento de la Corte Constitucional, que reemplazará al actual Tribunal Constitucional y que tendrá la facultad de analizar los fallos de la Corte Nacional de Justicia y de otras funciones del Estado.
La Corte Constitucional podría revisar incluso las eventuales peticiones de destitución del jefe del Estado, aunque esa decisión no sería vinculante a las que resuelva, en esa materia, la Asamblea Nacional o Parlamento.
EFE
