Los ejecutivos advirtieron, sin embargo, que la producción del yacimiento será suspendida nuevamente en caso de cualquier agresión contra los trabajadores.
La Corporación del Cobre (Codelco) anunció la reanudación, desde este sábado, de las faenas productivas en el mineral El Teniente, en el undécimo día de una huelga de trabajadores subcontratistas que demandan el cumplimiento de acuerdos laborales.
La mina se mantenía paralizada desde el jueves pasado por razones de seguridad, después que dos empleados resultaron heridos al ser apedreados los autobuses que transportaban a los trabajadores.
Fuentes de la compañía estatal, que es la mayor productora mundial de cobre, dijeron que las faenas se reanudarían a las 16.00 hora local (20.00 GMT), en el turno B de la mina subterránea, que el año pasado produjo 405.000 toneladas de cobre fino.
Los ejecutivos de El Teniente advirtieron, sin embargo, que la producción del yacimiento será suspendida nuevamente, en caso de cualquier agresión contra los trabajadores.
Desde el comienzo de la huelga, el pasado 16 de abril, se mantienen paralizadas las minas Salvador y Andina.
El año pasado, Salvador, que es la mina más pequeña de Codelco, produjo unas 65.000 toneladas de cobre, mientras la producción de Andina alcanzó a unas 218.000.
Codelco posee además las minas de Chuquicamata y Radomiro Tomic, que hasta ahora no han sido afectadas por la huelga y representan alrededor del 56 por ciento de la producción de la empresa.
Salvador, que además permanece bloqueada por piquetes de huelguistas que ocupan los caminos de acceso, fue objeto este viernes de un atentado incendiario que dañó los equipos que controlan el suministro de electricidad y agua al poblado, de 7.000 habitantes.
Supuesto «autoatentado»
En tanto, el presidente de la Confederación de Trabajadores del Cobre (CTC), Cristián Cuevas, insinuó hoy que el incidente pudo ser un «auto atentado».
«Hay hechos que son de dudosa procedencia, como actos de sabotaje o de violencia y nosotros acusamos a la propia estatal (Codelco) de querer manchar este proceso de huelga, porque las acciones se desarrollan al interior de la mina, donde nosotros no tenemos absolutamente ninguna responsabilidad», afirmó Cuevas.
La Confederación, desde el comienzo de la huelga, ha atribuido los brotes de violencia a «infiltrados», negando cualquier responsabilidad de los afiliados a la organización.
Cuevas reiteró además sus críticas a la negativa de Codelco para negociar con los huelguistas, actitud que calificó de «desacierto» y afirmó que la organización pedirá la intervención de la Justicia para que establezca responsabilidades en los hechos de violencia, «que no son responsabilidad de la Confederación ni de los trabajadores en huelga».
Codelco se ha negado a negociar con los huelguistas sobre la base de que sus empleadores son las empresas contratistas que prestan servicios a la minera estatal.
Incluso, los ejecutivos de la compañía rechazaron una idea lanzada el viernes por el ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade, quien propuso la instalación de una mesa tripartita, con representantes de Codelco, las empresas contratistas y los trabajadores en huelga para negociar una solución.
La propuesta de Andrade difiere de la posición que ha mostrado el resto del Gobierno, que hasta ahora ha respaldado la posición de Codelco.
La compañía, que el año pasado produjo alrededor de 1,6 millones de toneladas de cobre, suma pérdidas diarias por unos 10 millones de dólares a causa de la huelga, según sus ejecutivos.
EFE
