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Abbott obligado a disfrazarse de duro: «La clase política tiene que tener conciencia del profundo daño que se está causando al país» «Tengo mucha fe en lo que podemos hacer penalmente, pero tengo más fe en el control de los ciudadanos», afirmó

Abbott obligado a disfrazarse de duro: «La clase política tiene que tener conciencia del profundo daño que se está causando al país»

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En una entrevista, el Fiscal Nacional aclaró que es él quien dirige las acciones de su subordinado y que se «inventó un conflicto» con el jefe de la zona Oriente Manuel Guerra. A modo de prueba, contó la trastienda de cómo se inició la indagatoria contra el ex ministro Jorge Insunza.


El Fiscal Nacional Jorge Abbott concedió una extensa entrevista al diario La Segunda en la que fijó su posición respecto de los casos que se investigan en torno a platas políticas, a saber, los casos Penta-SQM, Corpesca y  el que liga al ex ministro Jorge Insunza. Abbott habla días después en que, a raíz de la indagatoria abierta contra Insunza, quedara al descubierto una diferencia entre él y su subordinado, el jefe de la Fiscalía Metropolitana Oriente Manuel Guerra, en cuanto a quién dio curso a la investigación.

Abbott aclaró que tiene una relación muy fluida con los fiscales de estas causas, quienes se dirigen a él como «Don Jorge», puntualizó, detallando además cómo comenzó la indagatoria contra Insunza:  «Un día domingo, viendo ‘Estado Nacional’, le mandé un mensaje al fiscal Gómez y le pregunté: ‘¿En qué está la investigación de Insunza?’, y me dice: ‘No, don Jorge, no tengo la investigación, pero voy a revisarlo de todas maneras’. Al día siguiente me confirma que no la tiene, y entonces le pregunto a Manuel (Guerra), y tampoco la tenía. Y él decidió abrir una (investigación) por oficio, pero a raíz de una inquietud mía, porque yo no puedo hacerlo. Antes no se había abierto por la cantidad de aristas y trabajo existente, pero se inventó un conflicto, de que el fiscal Guerra estaba enmendándome la plana», contó.

Además, negó que su nombramiento haya tenido que ver con una negociación política. «Hay gente que jura que mi designación fue producto de alguna negociación; que tenía negociado el caso Caval. ¡Jamás! Eso nunca ocurrió. No se me iba la vida por querer ser Fiscal Nacional. Si estoy aquí es porque pensé que podría ser un buen aporte, pero no estaba dispuesto por ningún motivo a ofrecer nada a cambio. Y tampoco estaría dispuesto a ofrecerlo ahora», afirmó.

El Fiscal Nacional enfatizó que será inflexible con la clase política. «Fui muy claro, particularmente con los senadores, de que aquí no habría ningún perdonazo. A lo que sí me comprometí fue a tratar de evitar situaciones de exceso de protagonismo, particularmente en las formalizaciones, en las que se generaba un daño mayor al que puede producir el ejercicio de la acción penal», afirmó.

En relación con los casos de financiamiento irregular, Jorge Abbott hizo una crítica de fondo a la clase política en general. «Me cuesta creer que no seamos capaces de aprender una lección sobre algo que está dañando mucho al país. La clase política tiene que tener conciencia, más allá del reproche penal, del profundo daño que se le está causando al país. Pero más que producto del reproche penal, sino producto de la conciencia pública de nuestros dirigentes, debería haber un cambio de actitud. Además, hay que agregarle el control que tiene hoy la ciudadanía respecto de estos hechos, que no existía en tiempos del MOP­-Gate. Hoy, la ciudadanía está mucho más empoderada. Entonces, tengo mucha fe en lo que podemos hacer penalmente, pero tengo más fe en el control de los ciudadanos», afirmó.

 

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