Credit Suisse volvió a recortar sus proyecciones de crecimiento para Chile.
El banco suizo rebajó su estimación a 1,9% de 2,7%, pero advierte que la desacelaración no durará para siempre y recomienda a sus clientes "mantener la calma y continuar".
El estudio asume un crecimiento de 0,4% en el tercer trimestre –el que el ministro Arenas dijo sería el más débil del año– y de 0,9% en el cuarto (cifras no analizadas).
Credit Suisse también recortó sus proyecciones para 2015. Ahora estima que la economía crecerá 3,2%. La estimación anterior era de 3,8%. Y señala que el PIB potencial es de alrededor de 4%.
"Estimamos que el gasto público y exportaciones serán las principales fuentes que impulsarán el crecimiento, mientras el consumo y gasto privado se recuperará solo modestamente", señala el informe.
Dice que el gobierno tiene amplio espacio para adoptar políticas contracíclicas agresivas para reactivar la economía.
Acerca de la política monetaria, Credit Suisse sostiene que el ciclo expansivo está cerca de llegar a fin y que terminará con una Tasa de Política Monetaria de 3,0%. Estima que el Banco Central se verá limitado por la aún persistente inflación y el posibilidad de que el peso siga debilitándose.
El banco proyecta que la inflación cerrará el año en 4,7%, pero volverá a la meta del BC de 3% a fines de 2015, aunque admite que predecir el IPC en las actuales condiciones es complicado.
El informe también destaca que la aversión al riesgo en la banca, empresas y consumidores es el principal factor detrás del enfriamiento en el crecimiento de las colocaciones, ya que las tasas han caído en tándem con la TPM.
Credit Suisse estima que el déficit fiscal se disparará y tocará 2,1% este año, el mayor desde 2009, y aumentará a 2,3% del PIB el año próximo.
Reformas de Bachelet
El informe dice que el foco de los inversionistas el resto del año estará en la reforma laboral. Y advierte que si los actuales temores del empresariado, en cuanto a que el proyecto dará mayores poderes a los sindicatos y reducirá la flexibilidad laboral, se confirman, la confianza empresarial seguirá empeorando, "que es lo opuesto de lo que el país necesita.
