Publicidad
Wimbledon: la hispanovenezolana Muguruza tiene un sueño del tamaño de una Catedral

Wimbledon: la hispanovenezolana Muguruza tiene un sueño del tamaño de una Catedral

Publicidad
Andrés Alburquerque
Por : Andrés Alburquerque Periodista El Mostrador Deportes
Ver Más

La tenista venció a la polaca Radwanska y se enfrentará en la final a la número 1 del mundo, la estadounidense Serena Williams, quien demolió a la rusa Sharapova.


Garbiñe Muguruza (20ª) nació en Venezuela y aunque aprendió a jugar tenis a los tres años, a los seis se trasladó a la tierra de su padre, para hacer una carrera en la Academia Bruguera, en Barcelona. Ahora, a los 21, está a las puertas de la consagración, aunque tendrá una prueba de fuego en la Catedral.

La muchacha de 1,82 metro y que calza 41 accedió por primera vez en su carrera a una final de Grand Slam, pero enfrente tendrá a la número 1 del mundo, la estadounidense Serena Williams, quien ya ha ganado cinco veces en Wimbledon (2000, 2002, 2008, 2009 y 2012).
Será una tarea titánica para Muguruza, especialmente por jugar sobre césped. Porque para quienes tienen memoria, el apellido de la hispano-venezolana les sonará conocido: el año pasado eliminó a la Williams en Roland Garros, en una de las mayores sorpresas de los últimos años. Además, con números elocuentes: 6-2 y 6-2.

Serena, quien ya había vencido a Muguruza en el Abierto de Australia de 2013 (6-2 y 6-0), se tomó revancha de su derrota en París con una nueva victoria en Melbourne este año, pero con un marcador mucho más estrecho: 2-6, 6-3 y 6-2.

Además, en su corta y accidentada carrera (incluyendo una operación de tobillo que la tuvo seis meses sin jugar en la segunda mitad de 2013 y varios retiros por enfermedad y lesión), la española ha conseguido triunfos resonantes sobre jugadoras dentro o ex top ten, como Caroline Wozniacki, Simona Halep, Vera Zvonareva, Jelena Janković, Ekaterina Makarova y Agnieszka Radwanska.

De hecho, la polaca fue su víctima de hoy, con lo que su récord sobre ella quedó 3-2. Muguruza batió a toda una finalista en Londres (en 2012) y campeona de 14 torneos de la WTA (la hispano-venezolana sólo tiene uno), por 6-2, 3-6 y 6-3, en casi dos horas de partido.

Fue una lucha muy entretenida, entre la fuerza de la vencedora y la inteligencia de la polaca. El mejor golpe de Muguruza, su derecha, recta o invertida, causó estragos en su adversaria.

Sobre llagar a la final, Garbiñe dijo: “Mi momento tendrá que llegar, si es que llega, cuando me toque. Hay gente de 20 años que ya tiene un Grand Slam y otros que lo consiguen con 30, o aquellos que ganan uno con 18 y luego desaparecen… Cada uno llega a su punto de forma natural. No hay que creerse muy buena, porque luego llegan los chascos”.

Es la primera hispana en una final de Wimbledon desde que lo hiciera Conchita Martínez, en 2000.

Mientras, Williams “demolió” por 6-2 y 6-4, en una hora y 18 minutos, a la rusa Maria Sharapova para intentar conquistar su sexto título en la Catedral, en lo que sería su título 21° de Grand Slam.

Hoy resolvió por la vía rápida ante la bella rusa, gracias a su implacable servicio (14 aces) y su magistral derecha (29 winners).
“Estoy muy emocionada. Estaba un poco nerviosa al principio, pues son semifinales de Wimbledon y hacía mucho tiempo (2012) que no llegaba aquí”, dijo Serena tras el encuentro. “Ella jugó muy bien. Mediado el partido mejoró su tenis, lo que me permitió aumentar también mi nivel. Estoy muy feliz de haberme llevado la victoria y de estar en la final de Wimbledon”, agregó.

Y sobre Muguruza, advirtió que “es una gran jugadora. Ya me ganó antes y no será un partido fácil, para nada. Tendré que pelear mucho”, declaró la menor de las hermanas Williams.

Publicidad

Tendencias