Chile en los tres partidos que disputó se generó 5 oportunidades de gol. Gareca enfrenta el gran desafío del retorno de las clasificatorias y cambiarle la cara a una selección que sufre “anemia” goleadora.
La actuación de Chile en Copa América fue realmente pobre y deja muchas dudas de cara a las Clasificatorias.
El equipo no ganó y además no convirtió. Anemia total en los números, pero tal vez lo más preocupante pasa por el juego y la cantidad de jugadores de nivel, que pueden hacer del Chile de Gareca una selección que inspire respeto y competitividad.
Todos estamos claros en que al técnico de la selección se le contrató para intentar ir al Mundial, pero en la Copa América había un mínimo, una vara que se debía alcanzar. Los cuartos de final.
Analicemos en profundidad el desempeño del equipo. Chile en los tres partidos que disputó se generó 5 oportunidades de gol. Sí, leyó bien, tan solo 5 ocasiones reales de convertir. Muy bajo porcentaje.
Está claro que Gareca no es mago y no podrá, en menos de tres meses, encontrar jugadores para solucionar varios temas, sobre todo respecto del funcionamiento del conjunto. El más importante tiene que ver con el gol. Chile no tiene hoy –y hace rato– un goleador. Qué paradoja de la vida y el fútbol, teniendo en esta Copa América a los dos goleadores históricos de la Roja, el equipo no encontró los abrazos.
Y ese goleador tampoco está en la liga nacional, donde Zampedri hace cuatro años viene dominando.
Por eso la radiografía de cara al retorno de las clasificatorias es absolutamente preocupante. Chile deberá enfrentar este segundo semestre a Argentina, Colombia y Perú de visita; recibiendo a Brasil, Bolivia y Venezuela en el Nacional.
De local debe asegurar a lo menos 7 puntos. De visita, tratar de rescatar algo en Lima. Duro calendario para la actual realidad de la selección.
La opción real es que Ricardo Gareca transforme al equipo en una gran fuerza colectiva, donde hoy Chile no cuenta con las individualidades de antaño, con las que se podía ganar un partido al recurrir a ellas. Bravo está en sus últimas actuaciones. Sánchez también está jugando sus últimos años de fútbol. Y Vargas no lográ encontrarse con el gol.
Dentro de todo lo negativo, hubo algunas actuaciones que merecen ser destacadas, a pesar del bajo nivel de “equipo” en la Copa. Bravo, Isla, Díaz, Echeverría y Lichnovsky respondieron, en general. El resto quedó muy en deuda.