Los habitantes de las zonas aledañas al macizo aseguran que no cuentan con las garantías de que su ganado estará en buenas condiciones.
A las 07:00 horas de esta mañana comenzó el plan de evacuación de habitantes de las zonas cordilleranas aledañas al volcán Copahue, en la región del Bío Bío, ante el peligro de una inminente erupción del macizo volcánico.
El operativo, que tiene como objetivo trasladar a cerca de 2.500 personas de los territorios más altos de los cajones del Queuco y del Bío Bío, presenta con el siguiente problema: la reticencia de los pobladores a abandonar sus casas y animales.
«En primera instancia están con la aprehensión de dejar sus pertenencias, pero entienden que la preocupación del gobierno es salvaguardar sus vidas», sostuvo la gobernadora provincial de Bío Bío, María Carolina Ríos, en entrevista con 24 Horas al Día .
Durante esta jornada se tenía contemplado que se evacuaran unas 700 personas, entre mujeres y niños. Restando por trasladar -este miércoles- a 2.240 habitantes.
Ante la preocupación de los habitantes por el futuro de sus animales, el seremi de Agricultura del Bío Bío, José Manuel Rebolledo, aseguró que de mantenerse la actual condición volcánica, se mantendrán a los animales arriba, proporcionándoles alimentos a partir del quinto día de ser necesario. De cambiar el escenario, dijo, se bajarían a los más de 20 mil animales.
Para el geólogo jefe del programa de ‘Riesgo Volcánico’ de Sernageomín, Luis Lara, la probable erupción del volcán Copahue en la cordillera de la Región del Biobío podría ir de «pequeña a mediana».
En entrevista con Radio Cooperativa, el experto explicó que «el volcán Copahue es un volcán bastante activo de Los Andes del sur, tiene varias erupciones recientes, la última fue en diciembre del año pasado-enero de este año, no fue muy grande, pero digamos que es un volcán de los activos que tenemos en nuestro país y por esa misma razón está siendo continuamente monitoreado».
Agregando que «aquí podríamos esperar una erupción algo mayor que la de diciembre, pero no tan grande como la erupción del Chaitén el 2008, ni tampoco tan grande como la erupción del Cordón Caulle el 2011. Estamos hablando más bien de una familia de erupciones pequeñas a medianas, quizás».
«El volcán Copahue normalmente presenta algunos pocos eventos (sísmicos) al día y desde el domingo a esta parte ha llegado ha tener más de 100 eventos sísmicos por hora, pequeños temblores, de pequeña magnitud, pero en número y en energía liberada finalmente es mucho más que lo normal y eso se interpreta como el proceso precursor de una futura erupción», acotó Lara.
En ese sentido, el profesional indicó que «la intensidad de esta sismicidad sugiere que podríamos tener una erupción algo mayor que la ocurrida recientemente en diciembre-enero y eso naturalmente es un problema porque en una región con población, con características de ese tipo, genera un impacto que tratamos de mitigar entregando la información oportunamente».
«Esperamos que, de ocurrir una erupción, el impacto más severo se ve en los primeros 15 kilómetros en torno al volcán, eso es normalmente la zona más afectada, así ha ocurrido en el pasado con erupciones pequeñas y erupciones más grandes y los 25 kilómetros se hacen cargo de la posibilidad que la erupción sea de una cierta envergadura», afirmó Lara.
