
Brotes de inclusión: el emporio que genera trabajo inclusivo
Iniciativa da oportunidades laborales a personas con discapacidad. Debido a la situación actual, el emporio se estará operativo a partir de marzo del 2020.
En el marco del Día Mundial de la Discapacidad, que se conmemora este 3 de diciembre, Fundación Descúbreme realizará un llamado a promover los derechos y el bienestar de las personas con discapacidades en todos los ámbitos de la sociedad. Y es que si bien la promulgación de la ley de Inclusión de Personas con Discapacidad representa un avance en esta materia, aún siguen existiendo barreras para que puedan desarrollarse de manera independiente.
El caso de la Escuela Especial de La Reina es un ejemplo de lucha diaria para insertar a sus alumnos y exalumnos en el mundo laboral. Ellos se han preocupado de conseguir diversas fuentes de financiamiento para sus proyectos y reflejando lo anterior, por cuarta vez la escuela ha sido beneficiada con recursos del Fondo Descúbreme, los cuales le han permitido desarrollar proyectos referidos a la educación y trabajo inclusivo, capacitando a decenas de alumnos a través de diferentes talleres (aulas temáticas) y de un proyecto de emprendimiento que próximamente se instalará frente al establecimiento y al que cualquier persona podrá acceder.
Carola Rubia, directora ejecutiva de Fundación Descúbreme, explicó que “a nivel nacional, sólo existe este Fondo y otro de Senadis para financiar iniciativas de inclusión, pero ninguno es capaz de absorber la totalidad de las propuestas por sí sólo, dejando un número importante de estas sin concretarse. Invitamos a las personas a seguir donando sus vueltos para que proyectos como este sigan funcionando”.
Desde su puesta en marcha el Fondo Descúbreme ha financiado a más de 188 proyectos a lo largo del país, beneficiando a ceca de 3.500 personas. En ocho años ha repartido cerca más de 900 millones de pesos en recursos que provienen de la donación del vuelto que realizan los clientes de Unimarc, Ok Market, Mayorista 10 y Alvi.
Brotes de Inclusión
Javiera Castillo, terapeuta ocupacional y encargada del proyecto “Brotes de Inclusión”, comentó que es un gran desafío, porque la creación intelectual de “Brotes” nace directamente desde la visión y necesidad que tienen como equipo de trabajo de darle una futura alternativa laboral a los estudiantes con discapacidad cognitiva, ya que no son incorporados al mundo laboral por prejuicios, mitos o desconfianza, independientemente si tengan las habilidades para hacerlo.
“Yo tenía esa preocupación y rabia porque a ellos no se les está considerando como se debiese y cuando uno siente una necesidad busca y busca para poder cumplirla y así es como nació “Brotes de inclusión”.

Actualmente cuentan con cuatro aulas temáticas sobre artesanía, alimentación, servicios y carpintería y el curso laboral para jóvenes trastorno del espectro autista (TEA). Todos ellos crean sus propios productos, desde la siembra hasta el envasado, tienen su propia marca e incluso ya pudieron realizar su iniciación de actividades como cualquier otro trabajo. Con mucha dedicación y entusiasmo, estos jóvenes venderán mermeladas, hierbas, frutas y verduras, pan de diferentes tipos y alfajores e incluso se podrán hacer pedidos de tortas galletas y cócteles en general.
“El proyecto considera capacitación a nuestros futuros trabajadores en términos de atención al cliente, manejo del dinero, calidad y estética de los productos, porque como ellos estarán atendiendo directamente al público necesitaban ser capacitados como vendedores de un emporio”, explicó Javiera Castillo.
Agregó que la inclusión laboral de personas en situación de discapacidad ha sido siempre un sueño que ahora se ha ido concretizando más gracias a la Ley Nº 21.015, pero tampoco se puede desconocer que hay estudiantes que necesitan más apoyo, por eso es parte de nuestra responsabilidad asegurarse de que ellos sí van a poder ejercer su derecho al trabajo.
Igual que cualquier persona
Cesar Aguilar tiene 17 años y se encuentra trabajando en el aula temática de alimentación junto a otros 12 jóvenes que son alumnos de esta escuela. En el taller César nos comentó que pueden desenvolverse en un trabajo como cualquier otra persona y que para eso se encuentran aprendiendo. “He aprendido a hacer varias cosas, incluso a veces, en mi casa me piden que haga sopaipillas o pan”.
Por su parte Patricia Contreras, directora del establecimiento, explicó que esta oportunidad que tuvieron gracias al Fondo Descúbreme les ha permitido diseñar una visión de futuro y concretarla en que los exalumnos puedan atender el emporio, que finalmente va a recoger la producción de los niveles laborales.
“Con esto también queremos dignificar a las personas que tengan algún tipo de discapacidad, porque ellos tienen potencial, pueden trabajar y se pueden desenvolver en diferentes ámbitos, queremos terminar con los mitos del niño pobrecito”.
Cabe destacar que, si bien este tipo de establecimientos reciben subvención estatal equivalente a tres unidades de subvención por alumno matriculado -al igual que el sistema regular-, a pesar de tener alumnos prioritarios, no reciben la subvención preferencial, es decir, que la política de Gobierno no consideró ni a las escuelas especiales ni a las escuelas de adultos.
“Esto nos deja en desventaja, porque no recibimos los fondos de la Ley SEP, sin embargo, de igual manera tenemos que hacer nuestros planes de mejora considerando todas las dimensiones, teniendo que autogestionar nuestros proyectos, por lo tanto, estamos hablando de inequidad y desigualdad en la educación”, explicó Patricia Cáceres.
Patricia destacó que “es muy importante que el mundo se atreva y tengan la oportunidad de compartir con personas que tengan algún tipo de discapacidad, porque ellos te conectan con las cosas importantes de la vida”.