
Mes de la Discapacidad: llaman a seguir promoviendo la inclusión
Fundación Descúbreme destacó la necesidad de que se generen políticas sobre discapacidad e inclusión en Chile que permitan eliminar las barreras de actitud y entorno que actualmente impiden la participación plena y efectiva de este grupo en la sociedad.
En el marco del Día Mundial de la Discapacidad, que se conmemoró el pasado 3 de diciembre, Fundación Descúbreme hizo un llamado a seguir impulsando la inclusión de personas con discapacidad en todos los ámbitos de la vida.
En la oportunidad, su directora ejecutiva, Carola Rubia, señaló que “es importante que, en tiempos como estos, los intereses de este colectivo social continúen siendo considerados, discutidos y potenciados, para favorecer su inclusión plena en la sociedad”.
Rubia destacó que hoy en día existen herramientas que pueden ayudar en esta labor, por ejemplo, la utilización de Big Data. “Este insumo ha demostrado ser de gran valor en otras partes del mundo para la toma de decisiones informadas sobre el diseño e implementación de políticas públicas y desarrollo de proyectos de inversión privada en diferentes temáticas. En Chile, también podría utilizarse para la generación de propuestas, y no sólo para las personas con discapacidad, sino que en todo orden de cosas”.
Derechos de personas con discapacidad
La ejecutiva destacó que en el año 2010 Chile adhirió a la Declaración de Derechos Humanos de las Personas con Discapacidad. “En estos momentos donde las personas están demandando sus derechos en distintos ámbitos, creemos relevante considerar a este colectivo que ha sido postergado durante mucho tiempo, y que con la Ley de Inclusión
Laboral ha tenido la oportunidad de sumarse al mundo del trabajo y mejorar su calidad de vida”.
Y aunque la inclusión al mundo del trabajo ha sido un buen primer paso, es importante considerar el ciclo de vida completo de las personas con discapacidad. “Para que este colectivo logre un tránsito a la vida independiente es importante que se generen las condiciones de accesibilidad adecuadas y que se materialicen en aspectos concretos como el acceso a una educación inclusiva, a un sistema de transporte que favorezca el desplazamiento de las personas con discapacidad, a poder arrendar o comprar una casa, a tener una cuenta corriente, o a cualquier ámbito de la vida que favorezca su independencia”.
Pobreza multidimensional y trabajo
Para la fundación, una de las áreas donde se ha evidenciado el gran impacto que tiene para las personas con discapacidad la aplicación de políticas públicas para el mejoramiento de su calidad de vida, es la incorporación al mundo del trabajo, porque ello les ha abierto una oportunidad para salir de la pobreza y de la exclusión social.
Según la última encuesta Casen (2017 – 2018) el 8,1% de la población chilena presenta discapacidad y la presencia de este colectivo prácticamente se duplica en el quintil más vulnerable versus el más acomodado. Esto se explicaría en parte, porque el 67,0% de las PcD se encuentran inactivas, el 2,6% están desocupados y solamente el 30,3% realizan actividades productivas.
En el mismo documento se señala además que un 31,2% de este grupo de la población trabaja por cuenta propia. Rubia destacó que “como fundación creemos importante apoyar a estas personas en sus emprendimientos, porque son pequeñas pymes que también están luchando por sobrevivir en medio de la crisis que se está viviendo en nuestro país. Esta es una oportunidad de mirarlos como ciudadanos que tienen los mismos derechos que todos, y que también aspiran a vivir en paz y de manera independiente”.
Es así que el principal problema de las personas con discapacidad no reside en los porcentajes, su ubicación o su género, sino en la percepción que tiene la sociedad con ellos. “El país enfrentará una serie de desafíos futuros, en los cuales todos estamos llamados a participar. Nuestro llamado es a seguir incluyendo a las personas con discapacidad en todos los ámbitos de la vida, como una manera de garantizar sus derechos como cualquier ciudadano. Tenemos que entender la diversidad como un programa que demanda una inversión social a largo plazo, que necesita medir su impacto social y evaluar sus resultados”, concluyó la directora ejecutiva.