Sustentabilidad
En la comuna de Lampa se encuentra el humedal de Puente Negro, uno de los últimos humedales de la Región Metropolitana que da refugio a la becacina pintada, ave en peligro de extinción. Sin embargo, actualmente se encuentra amenazado por rellenos y construcciones ilegales que, a pesar de estar clausuradas por la Superintendencia del Medio Ambiente, las operaciones siguen en marcha.
A poco más de 20 km al norte del centro de Santiago, en la comuna de Lampa, se encuentra el humedal de Puente Negro. Forma parte del complejo de humedales de Batuco, que además de la laguna Batuco, incluye a los sectores de La Cadellada, Santa Inés, Puente Negro y los humedales de Küla-Kura (San Luis y O’Higgins) en Quilicura.
Este conjunto integrado de zonas húmedas ha sido declarado Sitio Prioritario para la Conservación de la Biodiversidad, y constituye una red de sitios irremplazables para la flora y fauna nativa en la región Metropolitana, con abundancias de miles de aves acuáticas, algunas de las cuales mantienen aquí sus principales poblaciones en el país. Estos sitios son los últimos vestigios que van quedando de una zona de humedales mucho mayor, que en las últimas décadas ha ido desapareciendo producto del crecimiento indiscriminado de la ciudad.
El progresivo deterioro del humedal recibió su golpe final en 2019, cuando la empresa Inversiones Lampa SPA comenzó un loteo irregular sobre el mismo sitio, abarcando varias hectáreas del lugar. La figura empleada es la de una sociedad por acciones, un plano con subdivisiones de escasos metros cuadrados, y la venta de acciones que otorga derecho a ocupar subdivisiones. Ninguna tramitación ni cumplimiento de normativa de división predial ni construcción, menos aún de normativa ambiental.
En septiembre de ese año, desde la Red de Observadores de Aves y Vida Silvestre (ROC) se notificó de esta situación a las autoridades correspondientes: la Municipalidad de Lampa y todos sus concejales, la Subsecretaría del Medio Ambiente y la Seremi del MMA en la Región Metropolitana; además se realizaron denuncias ante el MINVU (por ausencia de permisos de subdivisión y construcción) y en la Superintendencia del Medio Ambiente (por elusión del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, SEIA).
Frente a esto, la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA), en junio de 2020 comenzó a realizar una serie de inspecciones ambientales en el sitio, las cuales terminaron con la clausura de la zona y prohibición de continuar con la construcción. A pesar de la resolución, hoy las obras continúan.
Elizabeth Salazar, quien compró parte del terreno, acusa a la empresa de estafa, ya que asegura que lo que compraron cumple con todas las características de lo que se llaman “loteos brujos”, lo que se entiende como un loteo que está al margen de la legislación vigente en materia urbanística y territorial, que implica riesgos ambientales y de asentamiento para las personas que ocupen los terrenos.
“A nosotros nos vendieron el proyecto prometiéndonos que íbamos a tener nuestros terrenos de 500 mt cuadrados, donde íbamos a poder construir nuestras casas, nos mostraron planos, papeles, de todo. Pero la verdad es que llevo 7 meses sin agua ni luz, viviendo con un generador y comprando agua a los camiones que pasan por el lugar, porque ni siquiera son camiones aljibe de la municipalidad”, comenta Elizabeth.
El loteo no cuenta con los permisos de la Municipalidad de Lampa y según quienes denuncian, al estar clausurada la entrada principal del terreno, los camiones siguen entrando al lugar por entradas alternativas y así, las obras continúan.
Ivo Tejeda, Director Ejecutivo de ROC, explica que la intervención humana en el humedal Puente Negro está dejando una huella imposible de borrar, ya que, al rellenar “con tierra los humedales, después de haberse secado y se contruye arriba, la recuperación se hace casi imposible”, explica Tejeda.
Elena Valdés Oteiza, representante legal de Inversiones Lampa SPA, al ser contactada para efectos de esta nota, no quiso referirse al tema ni dar declaraciones. Sin embargo, el ex representante de la empresa, Danyelo Oteiza, en conversación con Meganoticias aseguró que en ese sector no existe un humedal y que jamás ha tenido contacto con las autoridades. Sin embargo, existen actas de fiscalizaciones y multas por parte de la Municipalidad de Lampa que demuestran lo contrario.
Mientras tanto, las familias siguen sin tener respuesta ni solución y el complejo de humedales de Batuco sigue reduciéndose cada día más, impidiendo que las próximas generaciones alcancen a conocer y disfrutar toda la biodiversidad que encuentra en estos sitios un refugio para sobrevivir.
