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La fallas que llevaron a los socavones en Viña del Mar, dejando a cientos de personas sin hogar PAÍS

La fallas que llevaron a los socavones en Viña del Mar, dejando a cientos de personas sin hogar

Las obras de mitigación del Ministerio de Obras Públicas, tras el primer socavón en Reñaca el pasado 22 de agosto, provocaron un nuevo derrumbe en el terreno ya dañado, lo que ha obligado a la evacuación de nuevas familias de otros edificios residenciales.


El 22 de agosto, en medio de un sistema frontal, la rotura de un colector de aguas lluvias -cuya revisión periódica y mantención corresponde al Ministerio de Obras Públicas – provocó un enorme socavón frente al edificio Kandinsky -construido en 2012-, en el sector de Cochoa, entre Viña del Mar y Concón.

En menos de tres semanas, y producto de las obras que se realizaban para contener la emergencia -en combinación con nuevas lluvias-, se generó un segundo socavón, poniendo en riesgo nuevos edificios residenciales. Hasta el martes 12 de septiembre ya se han evacuado cuatro de ellos.

La responsabilidad del primer desprendimiento fue asumida días después por la propia ministra Jessica López: “Si este colector se rompió, es responsabilidad nuestra. Esto se detectó el 10 de agosto. Se emitió un decreto de emergencia que permitió a empresas a visitar la obra y cotizar. Esperamos que hoy las empresas puedan hacer las propuestas de trabajo y ojalá comenzar las obras la próxima semana”, señaló en entrevista en radio Concierto el 25 de agosto.

Ahora, ante el segundo socavón, el seremi de la Región de Valparaíso, Yanino Riquelme, planteó que “el problema es que con esta caída muy intempestiva de agua la obra de mitigación que se hizo entendemos que también colapsó y por lo tanto eso empezó a generar un nuevo socavón”.

Hablan expertos

El colector fue construido el 2005, cuando la normativa u la densificación del lugar eran distintas.

El arquitecto Ignacio Panat, consultado por La Tercera, sostuvo que “deja en evidencia un mal cálculo de las aguas lluvias, donde la descarga de esa cantidad dejó una saturación. Las obras de mitigación trasladaron el problema para otro lado, generando un nuevo socavón. Al final, el problema lo corrieron para el lado”.

En tanto, el biólogo Salvador Donghi, director de Simbiosis Bioconsultora, señaló al mismo medio que “el colector de aguas lluvias es una solución añeja, extemporánea e inútil en este contexto y sobre todo hoy día, desperdicia las aguas lluvias botándolas al mar, lo que atenta contra la adaptación al cambio climático. No se pueden concentrar las aguas en un sector de dunas porque la duna actúa como esponja, absorbe esa agua, aumenta el peso y entonces viene el colapso”.

“Si la lluvia reventó el colector, con mayor razón iba a arrasar con la estructura provisional. Esto, a su vez, provocó otro socavón, así que, a falta de un socavón, ahora hay dos, y ya no hay un solo edificio amenazado, sino dos o tres”, explicó a Las Últimas Noticias Álvaro Peña, académico de la Escuela de Ingeniería de Construcción y Transporte de la Pontificia Universidad Católica de Vaparaíso (PUCV).

Jeanette Bruna, abogada el edificio Santorini, subrayó que “las obras mal ejecutadas del MOP en estas circunstancias han puesto en riesgo un nuevo edificio, y sobre todo considerando que es en la calle donde un técnico señaló que existía riesgo de que cediera producto de una nueva lluvia”.

La profesional agregó que evaluarán recurrir a tribunales para exigir que se realicen las obras pertinentes con estudios técnicos que los avalen.

“Todo el mundo habla de los edificios como si los edificios fueran los causantes de este problema. Lo que ha fallado aquí es una obra del MOP, el único riesgo que han tenido los edificios es estar cerca de una obra del MOP, no es un verdadero riesgo estar en las dunas. Aquí, cuando fue el terremoto de 2020, ningún edificio sufrió algún daño”, señaló por su parte Víctor Quiroz, arquitecto del edificio Kandinsky y vecino del lugar.

Respecto de los cuestionamientos a la decisión de construir sobre un campo dunar, el experto en emergencias, Michel De L’Herbe, señaló en una entrevista a Mega que “el Estado autorizó estas construcciones, que desde el punto de vista ingenieril no hay por qué pensar que están mal construidas. Hoy día las soluciones de ingeniería permiten construir en este tipo de suelos (…) Hoy estas edificaciones se ven afectadas por otro elemento, que tiene que ver con un colector de aguas lluvias que colapsa y que por lo tanto debe ser investigado, como lo reconoció la propia ministra de Obras Públicas”.

Una visión que comparten los vecinos de la comunidad quienes, en declaraciones recogidas por Diario Financiero, han sostenido que “después del colapso de los colectores frente al edificio Kandinsky, se desvió el curso de las aguas lluvia frente al edificio Miramar Reñaca mediante una obra provisoria que era evidente que colapsaría a la primera lluvia”.

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