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La economía de EE.UU. no sería ni tan buena ni tan mala como para decidir la elección

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El presidente de la Reserva Federal de los EE.UU., Ben S. Bernanke, pronostica una economía de año de elecciones que no es ni buena ni mala: un crecimiento que decepciona pero evita que Estados Unidos vuelva a caer en la recesión que, según el multimillonario Bill Gross, podría producirse.

“Nadie está satisfecho con el lugar donde estamos hoy, naturalmente, pero sin duda hubo mejoras significativas desde mediados de 2009 cuando comenzó la recuperación”, dijo Bernanke ante el Congreso el 18 de julio. “Reconozco que muchos estadounidenses todavía piensan que la situación no es satisfactoria, pero avanza en la dirección correcta”.

Con los votantes atentos a la economía como tema más importante, un crecimiento que progresa a duras penas podría no proporcionar al republicano Mitt Romney la munición necesaria para desbancar al presidente Barack Obama, según Dan Schnur, director del Instituto de Política Jesse M. Unruh de la Universidad del Sur de California en Los Ángeles. Los funcionarios federales pronostican una expansión estadounidense de 1,9 por ciento a 2,4 por ciento este año, con el desempleo clavado en alrededor de un 8 por ciento.

“No es lo suficientemente buena para reelegir automáticamente a Obama pero no es lo bastante mala para elegir automáticamente a Romney”, explicó Schnur, asesor de campaña del senador republicano por Arizona John McCain en su primer intento de llegar a la Casa Blanca en 2000. “Estamos en una etapa intermedia, lo que hace de la elección algo impredecible”.

Bernanke no pronostica la recesión a que hizo referencia Gross, que dirige el mayor fondo de bonos del mundo en Pacific Investment Management Co., en un mensaje de Twitter del 16 de julio. Gross dijo que EE.UU. se “acerca a la recesión cuando se mide por empleo, ventas minoristas, inversión y ganancias de las empresas”.

Aumento del desempleo

La tasa de desempleo terminará el año entre 8 por ciento y 8,2 por ciento y caerá a entre 7,5 por ciento y 8 por ciento en 2013, calculan los funcionarios de la Fed. El desempleo fue del 8,2 por ciento en junio, por encima del 8,1 por ciento de abril.

“Hay menos probabilidades de que se inicie una recesión en la segunda mitad de 2012”, señaló Martin Feldstein, profesor de la Universidad de Harvard en Cambridge, Massachusetts. “El crecimiento probablemente esté en una tasa de menos del 2 por ciento. Pero hay riegos a la baja y no puede descartarse un crecimiento de menos de un 1 por ciento”.

Feldstein es ex presidente de la Oficina Nacional de Investigación Económica (NBER, por sus siglas en inglés) –organización de investigación privada, no partidaria y sin fines de lucro- y miembro del comité de ciclo de negocios de la NBER que decide cuándo comienzan y terminan las recesiones en los EE.UU. También fue jefe de asesores económicos del presidente Ronald Reagan.

“Ya sea que la economía esté creciendo muy lentamente o que esté a punto de dar un giro para peor, los votantes se sienten indecisos”, dijo Schnur del Instituto de Política Jesse M. Unruh. “En cualquiera de los dos casos, las cuestiones económicos no necesariamente los hacen inclinarse por el retador, pero el panorama actual no brinda muchas oportunidades para el presidente en ejercicio”.

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