No tenemos la respuesta, pero las parlamentarias entrevistadas –Adriana Muñoz, Maya Fernández y Lily Pérez- confían en que la próxima Ley de Cuotas logrará un avance. Hay procesos que son más culturales, que legales. Pero lo de Francia comenzó en los noventas de manera voluntaria y los movimientos sociales lo convirtieron en ley en el 2000. 17 años después, las leyes parecen no ser necesarias.
Los ojos del mundo se posaron en Francia tras las elecciones parlamentarias del domingo, ya que los franceses tendrán record de mujeres en la nueva Asamblea Nacional, la cual estará compuesta en un 38,65% por diputadas, cifra nunca antes vista en la historia de la Cámara Baja y un aumento de casi doce puntos porcentuales respecto a la legislatura pasada (26,9 %).
En total, 223 mujeres fueron elegidas durante la segunda vuelta de las elecciones legislativas para ocupar una cámara que cuenta con 577 puestos, frente a las 155 de los comicios de 2012.
“Esta evolución sin precedentes es un avance significativo (y) prueba de que la paridad no es ya una opción, sino una exigencia democrática”, destacó Danielle Bousquet, presidenta del Alto Consejo de Igualdad entre Mujeres y Hombres (HCE).
Adriana Muñoz es actualmente senadora por Coquimbo. Mientras era diputada, fue la primera mujer en ejercer el cargo de presidenta de la Cámara entre 2002 y 2003. Para ella, el aumento en la representación de mujeres en el Parlamento francés “es parte de un proceso que se inició en los años 1990. Cuando algunos partidos incorporaron voluntariamente las cuotas para elecciones parlamentarias. Desde el ‘90 fue muy lenta la incorporación por esta vía. Movilizaciones de organizaciones de mujeres y de militantes de partidos llevaron a que en el año 2000 se aprobase leyes de cuotas”.
Adriana sabe bien de lo que habla. Y explica sobre este proceso: “Las leyes de cuotas en Francia son de 2 tipos. En las elecciones Municipales, en que se postula en listas, se obliga a presentar la mitad de las mujeres. Las elecciones parlamentarias se eligen en distritos donde se lleva sólo 1 candidato por partido y se elige sólo 1 parlamentario (distritos uninominales). En estas elecciones no hay obligación de cuotas, sólo una sanción económica a los partidos que no cumplen con la cuota global”.
Hasta 28 millones de euros perdieron las formaciones políticas el último quinquenio por no ser paritarias, según el HCE, que también ha denunciado la tendencia de los partidos a colocar candidatas en los distritos más difíciles de ganar, por lo que acaban siendo elegidos más hombres que mujeres. El partido de Macron se ha desmarcado de esta tendencia, lo que hace que un 47% de sus diputados sean mujeres.
¿Cómo estamos en Chile?
En nuestro país estamos más que al debe. Tras la última elección legislativa y según cifras analizadas por el Movimiento ONU Mujeres para la igualdad de género, Chile se mantiene bajo el promedio de América Latina (25,2%) con un 15,8 % de representación femenina en el Parlamento. Sólo nos superan Guatemala (13,3%), Brasil (8,6%) y Paraguay (15,0%). Muy por debajo de países como Cuba (48,9%), Costa Rica (33,3%), Ecuador (41,6%) y de los vecinos Argentina (36,6%) y Perú (22,3%).
El porcentaje desglosado da cuenta de que, del total de 120 diputados en Chile, 19 son mujeres. En el Senado, sólo seis de 38 ocupan una silla parlamentaria.
¿Qué nos falta para alcanzar cifras como las que el mundo entero está aplaudiendo en Francia?
Para la senadora Muñoz, el resultado galo es producto de la conjugación de varios factores: “1. Un proceso cultural que parte en años 90′ con las cuotas voluntarias y que con las movilizaciones de las mujeres se logra una ley que obliga a cuotas. 2. Si bien el resultado de la ley de cuotas no impacta directamente en las elecciones parlamentarias, influyó en aumentar los liderazgos femeninos. Y 3. El momento político. La voluntad de recambio liderada por Macron, ayudó a disminuir la reelección de los candidatos tradicionales, la mayoría hombres, favoreciendo a mujeres que en la lógica tradicional tenían menos opción frente a estos candidatos”.
Maya Fernández, diputada por Providencia y Ñuñoa, encuentra que es “súper bueno que muchas más mujeres estén participando de la política y que hayan sido electas. Hay países que han avanzado culturalmente más que nosotros. Hay temas que no son tanto de leyes, sino de cultura. Nosotros en Chile por primera vez en las elecciones parlamentarias que vienen ahora tendremos una ley de cuotas, hay que ver cómo va a funcionar”.
Maya se refiere a la Ley de Cuotas que debutará en las próximas elecciones. La iniciativa establece que del total de las candidaturas a diputados o senadores inscritos por los partidos políticos o pactos electorales, ni los representantes hombres ni las mujeres podrán superar el 60%, asegurando así que al menos el 40% será de un sexo diferente.
“Creo que esta elección parlamentaria vamos a tener mayor cantidad de mujeres en el parlamento, lo cual va a ser una gran noticia para Chile”, dice optimista la diputada. “Espero de verdad que en Chile, así como en Francia, aumentemos la cantidad de diputadas y senadoras en nuestro parlamento. Tenemos un porcentaje muy bajo, de un 16%, cuando en nuestra población somos más del 50%”, añade Fernández.
Y sigue optimista: “Hemos sido discriminadas porque hay una cultura machista en Chile, pero eso ha ido cambiando. Creo que las nuevas generaciones vienen con otro switch. Lo veo en mi hijo de 16 años. Han cambiado mucho. Ellos hablan sobre igualdad, las generaciones pasadas no hacían eso, creían que era obvio que nosotras cuidáramos a los hijos o nos hiciéramos cargo de la casa. Las cosas están cambiando, si bien estamos avanzando, nos quedan aún pasos que dar, incluyendo nuestros partidos que también tienen machistas en sus filas, recién ha habido presidentas mujeres en los partidos, por ejemplo. Pero confío en que Chile tendrá un parlamento con más mujeres”.
Lily Pérez es senadora por la región de Valparaíso desde el año 2010 y le tiene fe a la Ley de Cuotas que se pondrá en práctica en la próxima elección: «Estamos avanzando en concretar lo que logró el parlamento en Francia. No lo veo tan lejano, hemos ido avanzando poco a poco porque sea cada vez mayor el número de mujeres y qué mejor ejemplo que Amplitud, teniendo una presidenta mujer del partido. Fuimos el primer partido de oposición en votar a favor de la Ley de Cuotas, y somos el primer partido en Chile en cumplir con la ley de cuotas de candidatas al parlamento. Hemos promovido candidatas Cores y Diputadas de distintos lugares de Chile”.
Al menos en términos de marco legal, el país está dando el paso. Ahora falta ver cuánto demoraremos como sociedad en dar ese tremendo salto cultural que nos lleve a tener paridad de género en el Congreso y, ojalá, en otros ámbitos, como el mundo empresarial o el académico. Nos queda mucho camino por recorrer.