Quiere dejar el tema atrás
El director se cansó de hablar de la acusación de violación que le ha seguido por décadas y dijo que su condena terminó.
Roman Polanski se encuentra en el Festival de Cine de Zurich promocionando su última película, Based on a True Story (Basado en una historia real) y tocó el tema del caso de violación que lo ha rondado por décadas y que sigue presente cada vez que se habla del director de 84, informó The Hollywood Reporter.
Fue en Zurich, pero en 2009, cuando la Fiscalía de Los Ángeles ordenó un proceso de extradición contra el ganador del Óscar por el crimen cometido el 11 de marzo de 1977, cuando Polanski fue arrestado y acusado de drogar y violar a Samantha Gailey (ahora Samantha Geimer) quien entonces tenía 13 años de edad.
El director se declaró culpable de relaciones sexuales ilegales con una menor, se sometió a evaluación psiquiátrica y pasó 42 días en la cárcel. Pero en 1978, cuando se enteró de que un juez iba a aumentar la sentencia (se habló de 50 años de prisión), Polanski huyó a París y se transformó en uno de los más célebres fugitivos. Y aunque la misma víctima con los años ha pedido desestimar el caso, la justicia se niega: incluso el mes pasado, el juez de California Scott Gordon rechazó la última petición de Geimer aseguró que seguiría adelante con el caso.
«Como saben, Samantha Geimer ha estado pidiendo más de 30 años para que esta cosa termine», dijo Polanski. «Pero lamento que los jueces que negociaron los últimos 40 años fueran corruptos, uno cubriendo al otro. Así que no, tal vez uno de ellos (eventualmente) deje de hacerlo».
«En cuanto a lo que hice: se acabó. Me declaré culpable «, dijo Polanski. «Fui a la cárcel. Volví a los Estados Unidos para hacerlo, la gente se olvidó de eso, o ni siquiera lo saben. Entonces fui encerrado aquí (en Zurich) después de este festival. Así que en la suma, hice unas 4 o 5 veces más de lo que me prometieron».
La polémica sobre el caso revivió a principios de este año luego de que Polanski accediera a presidir los premios Cesars, el equivalente de Francia a los Oscar, pero a lo que tuvo que renunciar por las reiteradas protestas de grupos que defienden los derechos de las mujeres.
El director además ha debido enfrentar otras denuncias por agresiones sexuales. En el 2010, la actriz británica Charlotte Lewis dijo que el cineasta la había violado cuando tenía 16 años, la misma edad que dijo tener otra víctima identificada como Robin M. quien dio su testimonio hace algunos meses. Ambas denuncias han sido rechazadas por el director.
Polanski en la conferencia en Zurich dijo que era «desafortunado» que sus películas actuales sean vistas según el escándalo sexual y judicial que lo afecta. Su nueva película, protagonizada por Eva Green y la esposa del propio director, Emmanuelle Seigner, recibió regulares críticas en Cannes, aunque marca un nuevo giro en la carrera del cineasta. «Hacer una película con dos mujeres, nunca he hecho eso. No me refiero sólo a dos mujeres en el set, sino un conflicto entre ellas. Todas mis películas tienen un conflicto entre hombres o entre hombres y una mujer. Pero dos mujeres, no. Así que esa fue una de las cosas que realmente me interesó. … Entre los hombres, el conflicto está más al aire libre, con las mujeres se oculta. Son más pérfidas que los hombres, en general. En la película, en esta historia, la verdadera confrontación llega muy tarde. Con dos hombres, vendría justo después del comienzo de la relación», sostuvo Polanski.
Es por eso que el director contó que pasó mucho menos tiempo ensayando con las actrices que lo que normalmente haría en una película «con tanto diálogo», pues dejó que ellas hicieran sus propias interpretaciones de sus personajes y escenas individuales. «Las dirigí menos de lo que suelo dirigir a los actores (masculinos)».
