La ex primera dama además sostuvo que faltó el «sello de mujer» en el segundo gobierno de Michelle Bachelet y que se dejaron otras políticas públicas de lado.
Cecilia Morel fue entrevistada en T13 Radio donde dio su visión del gobierno de Michelle Bachelet en cuanto a las preocupaciones e intereses de las mujeres.
En ese sentido, destacó que para ella el ejecutivo se centró en temas como el aborto dejando de lado otras áreas importantes. Por eso aclaró que siempre ha estado en contra de la interrupción del embarazo, aunque reconoce que es un tema que debía legislarse y que “es un tema que tensiona a las mujeres y el debate público”.
Además, aseguró que «por supuesto que el acompañamiento tiene que ser profesional neutro» y no debe condicionar hacia una determinada decisión. «Siempre es la mujer la que tiene que decidir”, agregó.
Morel recordó que en su rol de orientadora familiar le tocó conocer dos casos de mujeres que querían abortar. “La mujer lo que tiene es la duda, ella no viene decidida a hacerse un aborto, sino que viene con la angustia, de que por un lado quiere a ese niño y por otro lado, por muchas situaciones del entorno, no lo pueden tener”, sostuvo.
«Para mí el aborto es cuando no tienes una buena solución frente a un problema y el aborto es una decisión de por sí dolorosa y es una segunda herida», agregó.
Morel reconoce que la tercera causal, de violación, es la más complicada. Sobre si una hija tuviera que enfrentar una decisión así, la ex primera dama reconoce que es difícil: «No logro ni siquiera ponerme en el caso, es muy fácil hablar desde lo hipotético. No sé como reaccionaría, esa es la verdad. Yo digo que haría todo lo posible porque mantuviera su embarazo hasta el final, pero teóricamente, tengo muy claro que la teoría es más fácil que la práctica».
También sostuvo que la mujer tiene dos grandes temas que afecta a la mujer en su vida: el trabajo y la maternidad. En ese sentido, destacó que vio «poco interés» en fortalecer cómo la mujer puede tener hijos sin que le impida trabajar, recalcando la aprobación del postnatal de seis meses aprobado durante el gobierno de Piñera y la propuesta de aprobar salacuna universal, es decir, que el derecho no dependa de la cantidad de mujeres en una empresa, si no que sea de padres y madres.
Morel criticó que vio poca lucha contra violencia intrafamiliar y que faltaron campañas sistemáticas. «El tema de la violencia intrafamiliar no se puede aflojar nunca», indicó.
Por eso, fue enfática en señalar que en este segundo gobierno de Bachelet no sintió «su sello de mujer» y que no fue un gobierno que la representara en ese sentido.