
Las actrices víctimas de acoso sexual ya no temen y se muestran más fuertes y unidas que nunca
Luego de los vetos que recibieron varias actrices por no acceder a las peticiones de Harvey Weinstein, las intérpretes han recibido el apoyo y les han dado el espacio para volver a mostrar su talento.
Ya la alfombra roja de los premios Oscar tuvo una importante señal cuando Ashley Judd y Mira Sorvino decidieron pasar juntas ante los cientos de fotógrafos y periodistas que estaban esperando a las estrellas de Hollywood.
Ambas fueron denunciantes de Harvey Weinstein y ya no estaban solas sino se acompañaban y apoyaban mutuamente.
El director de El Señor de los Anillos, Peter Jackson, admitió en diciembre pasado que ambas formaban parte de la lista negra de Weinstein y que él recomendó que Sorvino no fuera parte de la trilogía épica.
«Recuerdo que Miramax nos dijo que eran una pesadilla para trabajar y que debemos evitarlos a toda costa. Esto fue probablemente en 1998 «, reveló Jackson. «En ese momento, no teníamos motivos para cuestionar lo que estos tipos nos decían, pero en retrospectiva, me di cuenta de que era muy probable que la campaña de desprestigio de Miramax estuviera en pleno apogeo».
«Ahí está, la confirmación de que Harvey Weinstein descarriló mi carrera, algo que sospechaba pero no estaba segura», twitteó la actriz en respuesta. «Gracias Peter Jackson por ser honesto. Solo estoy triste «.
Pero la tormenta pasó y ahora nadie duda de la veracidad de sus relatos. Y ellas se mostraron orgullosas y defendiendo la idea de Time’s Up.
«Quiero que la gente sepa que este movimiento no se detiene», dijo Sorvino en la alfombra roja, quien en enero reveló que ya estaba trabajando nuevamente y había logrado salir de tantos años de veto impuesto por una injusticia. «Queremos llevar nuestro activismo y nuestro poder a la acción», agregó.

Pero ese no fue la única señal de apoyo que tuvieron las víctimas de abuso y acoso sexual.
Salma Hayek, Ashley Judd y Annabella Sciorra, tres actrices víctimas del acoso sexual de Weinstein, reivindicaron el movimiento Me Too y Time’s Up desde el escenario de los Óscar.
«Hola, es genial volver a verlos a todos, ha pasado mucho tiempo», dijo Sciorra, quien también fue alejada de la industria por el veto de Weinstein tras rechazar sus propuestas indecentes. «Es un honor estar aquí esta noche. Este año muchos expresan su verdad y el viaje que queda por recorrer es largo, pero lentamente ha surgido un nuevo camino», manifestó.
«Los cambios que estamos viendo están dirigidos por nuevas voces poderosas, voces diferentes. Unirnos es un coro maravilloso para decir finalmente que el tiempo (de los abusos) se ha acabado», agregó.
Hayek además quiso rendir tributo a «los espíritus imparables que rompieron muros y percepciones contra su género, raza y etnicidad para contar su historias».
Mientras Judd dijo que esperaban asegurarse «de que los próximos 90 años llegan con posibilidades ilimitadas de igualdad, diversidad e inclusión. Eso es lo que este año nos ha prometido».